Tomo Dos Leyenda de Oro -Vidas de Los Martires-

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^tí la gloria , que tan bien teñía merecida. Enterráronle
con gran llanto y scnlimicnto los de Nisibe en su misma
ciudad, juzgando que como los habia defendido de los
persas en vida, así los defenderia después de muerto, co-
"IO lo hizo. Porque todo el tiempo que su sagrado cuerpo
estuvo en aquella ciudad la guardó ; pero después que Juliano
Apóstala tomó el imperio, y yendo á hacer guerra á
los persas, y dejando en Nisibe , como en frontera, ocho
mil-soldados en presidio para que la guardasen , la quilo
el mayor presidio y defensa que tenia, mandándole sacar
de la ciudad el cuerpo del santo prelado, por la honra
que allí se le hacia, y por el odio que Juliano tenia a nuesh'a
santa religión: y habiendo sido el mismo Juliano Apóstata
vencido de los persas, y muerto miserablemente en
aquella jornada , fué necesario que Joviniano, que le sucedió
en el impei io, diese aquella ciudad al rey de Pcrsia,
para contentarle , y perderla, por no perder lodo el imperio
: y entendieron todos , que no sucediera tan gran calamidad
á aquella ciudad, si las reliquias de Santiago se
bubierau guardado cu ella. Escribió este santo prelado
muchas obras , que refiere Genadio en el catálogo de los
ilustres varones: el cual comienza por las de Santiago,
presbítero, llamado el Sabio , y después obispo de Nisibe:
y dice, que fueron veinte y seis libros los que compuso.
Murió este santo prelado en tiempo de Constancio, emperador;
y el Martirologio romano hace mención de él á los 1 o
de julio, y lo mismo Ueda , Usuardo y Adon, y los demás
autores latinos que escriben vidas de santos , y los griegos
en su Menologio el postrero dia de octubre. Escribió su
vida ( como dijimos) Teodoreto , y Iráela en su cuarto to-
^o el P. Fr. Lorenzo Surio. Escriben de él Genadio , Cas:oJoro,
Nicéforo, y el cardenal Baronio en las Anotaciones
del Martirologio, y en el tercero y cuarto lomo de sus
Anales.
SAN CAMILO DE LEUS, FCNDADOR.—El glorioso san Camilo
de Lelis nació á 25 de mayo de VáZO en la villa de
Voquianico , en el arzobispado de Chieli, del reino de Ñápeles;
Juan de Lelis y Camila Compelió fueron sus padres,
ambos ¡lustres por la nobleza de su sangre: cuando Camila
dió á luz á nueslnmnto era tan anciana, que pasaba de
cincuenta y cinco años, y se acercaba ya á los sesenta, y
tan débil y extenuada de fuerzas , que todos juzgaban ser
naturalnienle incapaz detener hijos. Pocos días ánles de
dará luz á nuestro Camilo , tuvo un suefío misterioso, en
que le pareció que habia parido un hijo con una cruz en él
pecho, y que le seguían otros muchos niños que llevaban
tómbien en el pechó unas cruces semejantes; pensó que