Libro IV Congreso Internacional 2014

Sumado a una buena gestión, varios teóricos de la administración coinciden en afirmar que
el éxito o el fracaso de las organizaciones dependen, básicamente, de la capacidad de las
empresas para reconocer las competencias de sus trabajadores, e integrarlas eficazmente a
los sistemas, métodos y demás procesos laborales y/o productivo.
La gestión de recursos humanos como tal, es un término que se ha venido conceptualizando
conforme se van generando los cambios en la organización del trabajo. Por su parte,
Chiavenato (2000b:9) la define como “el conjunto de políticas y prácticas necesarias para
dirigir los aspectos de los cargos gerenciales relacionados con las personas, incluidos
reclutamiento, selección, capacitación, recompensas y evaluación de desempeño”.
En la actualidad, la globalización demanda a establecer relaciones de trabajo mucho más
flexibles, a desarrollar políticas de trabajo y a reconfigurar los procesos de selección y
reclutamiento del personal acorde a las necesidades de la empresa, para lograr ser más
competitiva.
Por ello, la base teórica de este trabajo se sustenta en dos teorías extraídas en las últimas
décadas. La teoría de Recursos y Capacidades y la teoría del Capital humano, las cuales
engloban los conceptos centrales de la gestión por competencias. La Teoría de recursos y
capacidades visualiza cada uno de los recursos y capacidades que posee la organización y al
ser una conformación única, lo constituye como una ventaja competitiva. La Teoría del
Capital humano centra al individuo como un conjunto de conocimientos, desarrollable para
incrementar su eficiencia productiva.
Por lo tanto, la sinergia entre ambas teorías conlleva a evaluar y a desarrollar las
capacidades del Capital humano para ser más competitivos. Por lo que Fernández (2005:24,
en Palomo, 2008) menciona que “el nacimiento de la Gestión por Competencias es como
una filosofía para movilizar las competencias de las personas hacia la consecución de los
objetivos del negocio”.
Implementándose de esta manera, una tendencia de revalorización de las capacidades y
habilidades del capital humano, como base de la competitividad organizacional (Cruz &
Vega, 2001). Es por ello que se convierte en una herramienta integradora de los sistemas de
Gestión del Capital Humano bajo un modelo único. El cual requiere que los directivos
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