14.05.2013 Views

Comentario de la Biblia Matthew Henry

Comentario de la Biblia Matthew Henry

Comentario de la Biblia Matthew Henry

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

mundano. Es bueno para nosotros que, el Profeta como Moisés, que es incomparablemente más<br />

po<strong>de</strong>roso y misericordioso, haya hecho expiación por nuestra alma y ahora interceda por nosotros.<br />

Regocijémonos en su gracia.<br />

CAPÍTULO XXXIII<br />

Versículos 1—6. El Señor rehusa ir con Israel. 7—11. El tabernáculo <strong>de</strong> Moisés es sacado fuera <strong>de</strong>l<br />

campamento. 12—23. Moisés <strong>de</strong>sea ver <strong>la</strong> gloria <strong>de</strong> Dios.<br />

Vv. 1—6. A quienes Dios perdona, hay que hacerles saber lo que merecía su pecado. ―Que ellos se<br />

vayan solos‖ expresaba en gran medida el <strong>de</strong>sagrado <strong>de</strong> Dios. Aunque Él promete cumplir el pacto<br />

con Abraham dándoles Canaán, les niega <strong>la</strong>s señales <strong>de</strong> su presencia con que habían sido<br />

ben<strong>de</strong>cidos. —El pueblo lloró por su pecado. De todos los frutos y amargas consecuencias <strong>de</strong>l<br />

pecado, lo que los verda<strong>de</strong>ros arrepentidos <strong>la</strong>mentan y temen más es que Dios se aparte <strong>de</strong> ellos. La<br />

mismísima Canaán no sería una tierra agradable sin <strong>la</strong> presencia <strong>de</strong>l Señor. Los que se fueron<br />

ataviados para mantener el pecado no pudieron hacer otra cosa que quitarse los atavíos como señal<br />

<strong>de</strong> pesar y vergüenza por el pecado.<br />

Vv. 7—11. Moisés tomó el tabernáculo y lo levantó fuera <strong>de</strong>l campamento. Parece haber sido un<br />

edificio temporal, armado para el culto, y en el cual él juzgaba <strong>la</strong>s disputas <strong>de</strong> <strong>la</strong> gente. El pueblo<br />

miraba en pos <strong>de</strong> Moisés; tenían muchos <strong>de</strong>seos <strong>de</strong> estar en paz con Dios y les interesaba saber lo<br />

que suce<strong>de</strong>ría. —La columna <strong>de</strong> nube que se había apartado <strong>de</strong>l campamento cuando fue<br />

contaminado por <strong>la</strong> ido<strong>la</strong>tría, ahora regresó. Si nuestro corazón sale al encuentro <strong>de</strong> Dios, Él vendrá<br />

misericordiosamente a nuestro encuentro.<br />

Vv. 12—23. Moisés es muy honesto con Dios. Así, <strong>la</strong> intercesión <strong>de</strong> Cristo, no sólo nos salva <strong>de</strong><br />

<strong>la</strong> ruina, a<strong>de</strong>más adquirimos el <strong>de</strong>recho a <strong>la</strong> eterna bienaventuranza. —Observe aquí cómo él<br />

argumenta. Nosotros hal<strong>la</strong>mos gracia a ojos <strong>de</strong> Dios si encontramos gracia en nuestros corazones<br />

para guiarnos y apurarnos en el camino <strong>de</strong> nuestro <strong>de</strong>ber. Moisés hab<strong>la</strong> como quien teme <strong>la</strong> i<strong>de</strong>a <strong>de</strong><br />

seguir a<strong>de</strong><strong>la</strong>nte sin <strong>la</strong> presencia <strong>de</strong>l Señor. Las promesas <strong>de</strong> <strong>la</strong> gracia <strong>de</strong> Dios y su misericordia para<br />

con nosotros, no sólo <strong>de</strong>ben alentar nuestra fe, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong>ben estimu<strong>la</strong>r nuestro fervor para orar.<br />

Observe cómo él presiona. Véase, en un tipo, <strong>la</strong> intercesión <strong>de</strong> Cristo, a <strong>la</strong> que siempre da vida para<br />

interce<strong>de</strong>r en favor <strong>de</strong> todo aquello que venga a Dios por Él; y que no es por ninguna cosa que haya<br />

a favor en aquellos por los cuales Él interce<strong>de</strong>. —Moisés pi<strong>de</strong> ver <strong>la</strong> gloria <strong>de</strong> Dios y también en eso<br />

es escuchado. La visión completa <strong>de</strong> <strong>la</strong> gloria <strong>de</strong> Dios, abrumaría aun al mismo Moisés. El hombre<br />

es malo e indigno <strong>de</strong> ello; débil y no pue<strong>de</strong> soportarlo; culpable y no podría sino temerlo. La<br />

reve<strong>la</strong>ción misericordiosa que se hace en Cristo Jesús es lo único que po<strong>de</strong>mos tolerar. —El Señor<br />

concedió lo que lo satisfaría abundantemente. La bondad <strong>de</strong> Dios es su gloria; y Él hará que le<br />

conozcamos por <strong>la</strong> gloria <strong>de</strong> su misericordia, más que por <strong>la</strong> gloria <strong>de</strong> su majestad. —Sobre <strong>la</strong> roca<br />

había un lugar a<strong>de</strong>cuado para que Moisés viera <strong>la</strong> bondad y <strong>la</strong> gloria <strong>de</strong> Dios. La peña <strong>de</strong> Horeb era<br />

un tipo <strong>de</strong> Cristo, <strong>la</strong> Roca <strong>de</strong> refugio, salvación y fuerza. Dichosos los que están sobre esta Roca. —<br />

La hendidura pue<strong>de</strong> ser un emblema <strong>de</strong> Cristo, como partido, crucificado, herido y muerto. —Lo que<br />

sigue <strong>de</strong>nota el imperfecto conocimiento <strong>de</strong> Dios en el estado presente, aun según se reve<strong>la</strong> en<br />

Cristo; porque esto, comparado con <strong>la</strong> visión celestial <strong>de</strong> Él, solo es como ver a un hombre que pasó,<br />

cuya espalda es lo único que pue<strong>de</strong> verse. Dios en Cristo, como Él es, en <strong>la</strong>s manifestaciones más<br />

plenas y bril<strong>la</strong>ntes <strong>de</strong> su gloria, gracia y bondad están reservadas para otro estado.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!