14.05.2013 Views

Comentario de la Biblia Matthew Henry

Comentario de la Biblia Matthew Henry

Comentario de la Biblia Matthew Henry

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

EL NEUVO TESTAMENTO<br />

MATEO<br />

Mateo, apellidado Levi, antes <strong>de</strong> su conversión era un publicano o cobrador <strong>de</strong> impuestos<br />

sometido a los romanos en Capernaum. Por lo general, se reconoce que él escribió su evangelio antes<br />

que cualquiera <strong>de</strong> los <strong>de</strong>más evangelistas. El contenido <strong>de</strong> este evangelio y <strong>la</strong> prueba <strong>de</strong> los<br />

escritores antiguos, muestran que fue escrito primordialmente para el uso <strong>de</strong> <strong>la</strong> nación judía. El<br />

cumplimiento <strong>de</strong> <strong>la</strong> profecía era consi<strong>de</strong>rado por los judíos como una prueba firme, por tanto San<br />

Mateo usa este hecho en forma especial. Aquí hay partes <strong>de</strong> <strong>la</strong> historia y <strong>de</strong> los sermones <strong>de</strong> nuestro<br />

Salvador, particu<strong>la</strong>rmente seleccionados por adaptarse mejor para <strong>de</strong>spertar a <strong>la</strong> nación a tener<br />

conciencia <strong>de</strong> sus pecados; para eliminar sus expectativas erróneas <strong>de</strong> un reino terrenal; para <strong>de</strong>rribar<br />

su orgullo y engaño consigo mismos; para enseñarles <strong>la</strong> naturaleza y magnitud espiritual <strong>de</strong>l<br />

evangelio; y para prepararlos para admitir a los gentiles en <strong>la</strong> Iglesia.<br />

—————————<br />

CAPÍTULO I<br />

Versículos 1—17. La genealogía <strong>de</strong> Jesús. 18—25. Un ángel se le aparece a José.<br />

Vv. 1—17. Acerca <strong>de</strong> esta genealogía <strong>de</strong> nuestro Salvador, obsérvese <strong>la</strong> intención principal. No es<br />

una genealogía innecesaria. No es por vanagloria como suelen ser <strong>la</strong>s <strong>de</strong> los gran<strong>de</strong>s hombres.<br />

Demuestra que nuestro Señor Jesús es <strong>de</strong> <strong>la</strong> nación y familia <strong>de</strong> <strong>la</strong> cual iba a surgir el Mesías. La<br />

promesa <strong>de</strong> <strong>la</strong> bendición fue hecha a Abraham y su <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>ncia; <strong>la</strong> <strong>de</strong>l dominio, a David y su<br />

<strong>de</strong>scen<strong>de</strong>ncia. Se prometió a Abraham que Cristo <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>ría <strong>de</strong> él, Génesis xii, 3; xxii, 18; y a<br />

David que <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>ría <strong>de</strong> él, 2 Samuel vii, 12; Salmo lxxxix, 3, y siguientes; cxxxii, 11; por tanto, a<br />

menos que Jesús sea hijo <strong>de</strong> David, e hijo <strong>de</strong> Abraham, no es el Mesías. Esto se prueba aquí con<br />

registros bien conocidos. —Cuando plugo al Hijo <strong>de</strong> Dios tomar nuestra naturaleza, Él se acercó a<br />

nosotros en nuestra condición caída, miserable; pero estaba perfectamente libre <strong>de</strong> pecado: y<br />

mientras leamos los nombres <strong>de</strong> su genealogía no olvi<strong>de</strong>mos cuán bajo se inclinó el Señor <strong>de</strong> <strong>la</strong><br />

gloria para salvar a <strong>la</strong> raza humana.<br />

Vv. 18—25. Miremos <strong>la</strong>s circunstancias en que entró el Hijo <strong>de</strong> Dios a este mundo inferior, hasta<br />

que aprendamos a <strong>de</strong>spreciar los vanos honores <strong>de</strong> este mundo, cuando se los compara con <strong>la</strong> piedad<br />

y <strong>la</strong> santidad. —El misterio <strong>de</strong> Cristo hecho hombre <strong>de</strong>be ser adorado; no es para inquirir en esto por<br />

curiosidad. Fue así or<strong>de</strong>nado que Cristo participara <strong>de</strong> nuestra naturaleza, pero puro <strong>de</strong> <strong>la</strong><br />

contaminación <strong>de</strong>l pecado original, que había sido comunicado a toda <strong>la</strong> raza <strong>de</strong> Adán. —Fíjese que<br />

es al reflexivo a quien Dios guiará, no al que no piensa. El tiempo <strong>de</strong> Dios para llegar con<br />

instrucción a su pueblo se da cuando están perdidos. Los consuelos divinos confortan más al alma<br />

cuando está presionada por pensamientos que confun<strong>de</strong>n. —Se dice a José que María <strong>de</strong>bía traer al

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!