14.05.2013 Views

Comentario de la Biblia Matthew Henry

Comentario de la Biblia Matthew Henry

Comentario de la Biblia Matthew Henry

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Vv. 8—12. Aquellos a quienes Dios promueve a cargos honrosos, los hace sentirse bajos ante sus<br />

propios ojos; don<strong>de</strong> Dios da gracia para ser humil<strong>de</strong>, ahí da toda <strong>la</strong> gracia necesaria. ¡Cuán alto hab<strong>la</strong><br />

<strong>de</strong> Jesucristo, <strong>de</strong> <strong>la</strong>s inescrutables riquezas <strong>de</strong> Cristo! Aunque muchos no son enriquecidos con estas<br />

riquezas, <strong>de</strong> todos modos ¡qué favor tan gran<strong>de</strong>, que se nos predique a nosotros, y que nos sean<br />

ofrecidas! Si no somos enriquecidos con el<strong>la</strong>s es nuestra propia falta. La primera creación, cuando<br />

Dios hizo todas <strong>la</strong>s cosas <strong>de</strong> <strong>la</strong> nada, y <strong>la</strong> nueva creación, por <strong>la</strong> cual los pecadores son hechos<br />

nuevas criaturas por <strong>la</strong> gracia que convierte, son <strong>de</strong> Dios por Jesucristo. Sus riquezas son tan<br />

inescrutables y tan seguras como siempre, aunque mientras los ángeles adoran <strong>la</strong> sabiduría <strong>de</strong> Dios<br />

en <strong>la</strong> re<strong>de</strong>nción <strong>de</strong> su Iglesia, <strong>la</strong> ignorancia <strong>de</strong> los hombres carnales sabios ante sus propios ojos,<br />

con<strong>de</strong>na a todo como necedad.<br />

Vv. 13—19. El apóstol parece estar más ansioso por los creyentes, no sea que se <strong>de</strong>sanimen y<br />

<strong>de</strong>sfallezcan por sus tribu<strong>la</strong>ciones, que por lo que él mismo tenía que soportar. Pi<strong>de</strong> bendiciones<br />

espirituales que son <strong>la</strong>s mejores bendiciones. La fuerza <strong>de</strong>l Espíritu <strong>de</strong> Dios en el hombre interior;<br />

fuerza en el alma; el po<strong>de</strong>r <strong>de</strong> <strong>la</strong> fe para servir a Dios y cumplir nuestro <strong>de</strong>ber. Si <strong>la</strong> ley <strong>de</strong> Cristo está<br />

escrita en nuestros corazones, y el amor <strong>de</strong> Cristo es <strong>de</strong>rramado por todas partes, entonces Cristo<br />

habita en él. Don<strong>de</strong> habita su Espíritu, ahí habita Él. Desearíamos que los buenos afectos fueran<br />

fijados a nosotros. ¡Cuán <strong>de</strong>seable es tener <strong>la</strong> sensación firme <strong>de</strong>l amor <strong>de</strong> Dios en Cristo en nuestras<br />

almas! —¡Con cuánta fuerza hab<strong>la</strong> el apóstol <strong>de</strong>l amor <strong>de</strong> Cristo! La anchura muestra su magnitud a<br />

todas <strong>la</strong>s naciones y rangos; <strong>la</strong> longitud, que va <strong>de</strong> eternidad a eternidad; <strong>la</strong> profundidad, <strong>la</strong> salvación<br />

<strong>de</strong> los sumidos en <strong>la</strong>s profundida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l pecado y <strong>la</strong> miseria; <strong>la</strong> altura, su elevación a <strong>la</strong> dicha y<br />

gloria celestiales. Pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>cirse que están llenos con <strong>la</strong> plenitud <strong>de</strong> Dios los que reciben gracia por<br />

gracia <strong>de</strong> <strong>la</strong> plenitud <strong>de</strong> Cristo. ¿No <strong>de</strong>biera esto satisfacer al hombre? ¿Debe llenarse con mil<br />

engaños, jactándose que con esas completa su dicha?<br />

Vv. 20, 21. Siempre es apropiado terminar <strong>la</strong>s oraciones con a<strong>la</strong>banza. Esperemos más, y<br />

pidamos más, alentados por lo que Cristo ya ha hecho por nuestras almas, estando seguros <strong>de</strong> que <strong>la</strong><br />

conversión <strong>de</strong> los pecadores y el consuelo <strong>de</strong> los creyentes, será para su gloria por siempre jamás.<br />

CAPÍTULO IV<br />

Versículos 1—6. Exhortaciones a <strong>la</strong> mutua tolerancia y unión. 7—16. Al <strong>de</strong>bido uso <strong>de</strong> los dones y<br />

gracias espirituales. 17—24. A <strong>la</strong> pureza y <strong>la</strong> santidad. 25—32. Y a cuidarse <strong>de</strong> los pecados<br />

practicados por los paganos.<br />

Vv. 1—6. Nada se exhorta con mayor énfasis en <strong>la</strong>s Escrituras que andar como correspon<strong>de</strong> a los<br />

l<strong>la</strong>mados al reino y gloria <strong>de</strong> Cristo. Por humildad entiéndase lo que se opone al orgullo. Por<br />

mansedumbre, <strong>la</strong> excelente disposición <strong>de</strong>l alma que hace que los hombres no estén prontos a<br />

provocar, y que no se sientan fácilmente provocados u ofendidos. Encontramos mucho en nosotros<br />

mismos por lo cual apenas nos podríamos perdonar; por tanto, no <strong>de</strong>be sorpren<strong>de</strong>rnos si hal<strong>la</strong>mos en<br />

el prójimo lo que creemos difícil <strong>de</strong> perdonar. Hay un Cristo en quien tienen esperanza todos los<br />

creyentes, y un cielo en el que todos esperan; por tanto, <strong>de</strong>bieran ser <strong>de</strong> un solo corazón. Todos<br />

tenían una fe en su objeto, Autor, naturaleza y po<strong>de</strong>r. Todos ellos creían lo mismo en cuanto a <strong>la</strong>s<br />

gran<strong>de</strong>s verda<strong>de</strong>s <strong>de</strong> <strong>la</strong> religión; todos ellos habían sido recibidos en <strong>la</strong> Iglesia por un bautismo con<br />

agua en el nombre <strong>de</strong>l Padre, <strong>de</strong>l Hijo, y <strong>de</strong>l Espíritu Santo como signo <strong>de</strong> <strong>la</strong> regeneración. En todos<br />

los creyentes habita Dios Padre como en su santo templo, por su Espíritu y gracia especial.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!