12.05.2013 Views

018-El último hombre-1 28/11/07 13:59 Página 1 - Cermi

018-El último hombre-1 28/11/07 13:59 Página 1 - Cermi

018-El último hombre-1 28/11/07 13:59 Página 1 - Cermi

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>018</strong>-<strong>El</strong> <strong>último</strong> <strong>hombre</strong>-1 <strong>28</strong>/<strong>11</strong>/<strong>07</strong> <strong>13</strong>:<strong>59</strong> <strong>Página</strong> <strong>11</strong>1<br />

<strong>El</strong> <strong>último</strong> <strong>hombre</strong><br />

»¿Es que no comprendes, Lionel, la intención de nuestro noble<br />

amigo? Una intención que tal vez ni él mismo conoce, pero<br />

que a mis ojos resulta evidente. Lord Raymond no nació nunca<br />

para ser zángano en un panal, ni para hallar contento en nuestra<br />

vida pastoral. Él cree que debe conformarse con ésta. Imagina<br />

que su situación presente impide sus posibilidades de engrandecimiento.<br />

Y por tanto, ni siquiera en lo más profundo de su corazón<br />

piensa en cambiar. Pero ¿no ves que, tras la idea de exaltarme<br />

a mí, está dibujando una nueva senda para sí mismo? ¿Una<br />

senda de acción de la que lleva mucho tiempo apartado?<br />

»Acudamos en su ayuda. Él, el noble, el guerrero, el más grande<br />

en todas las cualidades que adornan la mente y el cuerpo de un<br />

<strong>hombre</strong>... Él está capacitado para ser el Protector de Inglaterra. Si<br />

yo, es decir, si nosotros lo proponemos para el cargo, sin duda<br />

saldrá electo, y hallará, en el desempeño del cargo, terreno para<br />

ejercer los crecientes poderes de su ingenio. Incluso Perdita se alegrará.<br />

Perdita, en cuya ambición anidaba un fuego acallado hasta<br />

que se casó con Raymond, evento que durante un tiempo colmó<br />

todas sus esperanzas... Perdita se alegrará de la gloria y el<br />

ascenso de su señor y, tímida y bella, no rechazará la parte que le<br />

corresponda. Entretanto nosotros, los sabios del campo, regresaremos<br />

a nuestro castillo y, como Cincinato,* nos ocuparemos de<br />

nuestras tareas ordinarias hasta que nuestro amigo requiera<br />

nuestra presencia y ayuda aquí.<br />

Cuanto más razonaba Adrian en relación con ese plan, más<br />

factible me parecía. La terquedad con que defendía su no participación<br />

en la vida pública era inexpugnable, y su delicado estado<br />

de salud parecía suficiente argumento a favor de tal decisión. Su<br />

siguiente paso era lograr que Raymond confesara sus deseos secretos<br />

de reconocimiento y fama. Éste se presentó ante nosotros<br />

mientras nos hallábamos conversando. <strong>El</strong> modo en que Adrian<br />

había recibido su plan de proponerlo como candidato al Protectorado,<br />

así como sus propias respuestas, habían logrado que des-<br />

* Lucio Quincio Cincinato. Patricio de la antigüedad romana. En 458 a. C. fue<br />

llamado por el Senado para salvar al ejército romano y a Roma de la invasión.<br />

Recibió poderes absolutos y el nombramiento de dictador. Tras conseguir la victoria<br />

rechazó todos los honores para volver a trabajar la tierra. (N. del T.)<br />

<strong>11</strong>1

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!