12.07.2015 Views

El Enigma y el Misterio: Una Filosofía de la Religión

El Enigma y el Misterio: Una Filosofía de la Religión

El Enigma y el Misterio: Una Filosofía de la Religión

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

e l h e c h o r e l i g i o s o . h i s t o r i a y e s t r u c t u r aEs indudable que existen e, incluso, son en muchos casos más beneficiosasque muchas actuaciones morales muy <strong>de</strong>c<strong>la</strong>radamente r<strong>el</strong>igiosas.Cercana aunque diversa es otra reflexión que habría que hacersobre morales como <strong>la</strong> estoica o <strong>la</strong> <strong>de</strong> Baruch Spinoza; en <strong>el</strong><strong>la</strong>s me inclinaríamás bien a <strong>de</strong>scubrir un fondo r<strong>el</strong>igioso que no <strong>la</strong>s alejaría d<strong>el</strong>o expuesto.Tampoco querría <strong>de</strong>jar <strong>la</strong> impresión <strong>de</strong> reducir <strong>la</strong> r<strong>el</strong>igiosidad «<strong>de</strong> <strong>la</strong>segunda fuente» a <strong>la</strong> actitud r<strong>el</strong>igioso-moral amorosa, en que he insistido.Pienso que, con <strong>el</strong> <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> esa dimensión, se potencia —reorientada—toda <strong>la</strong> actitud adorativa y <strong>de</strong> expectativa <strong>de</strong> salvación. Másaún, tal cambio <strong>de</strong> centro <strong>de</strong> gravedad, aunque importante, no implicaque se hagan irr<strong>el</strong>evantes <strong>la</strong> sacralidad natural y sus <strong>de</strong>rivaciones simbólicas.En <strong>el</strong> ámbito mismo <strong>de</strong> <strong>la</strong>s r<strong>el</strong>igiones axiales encontraremosten<strong>de</strong>ncias r<strong>el</strong>igiosas más «naturalistas», como hay otras más puramente«humanistas».2.5.3. ¿Qué futuro es augurable?Al cerrar estas reflexiones sobre <strong>la</strong> r<strong>el</strong>igión, no podría <strong>de</strong>jar <strong>de</strong> referirme,anticipando algo <strong>de</strong> lo que voy a <strong>de</strong>cir en <strong>el</strong> capítulo tercero, a <strong>la</strong>situación <strong>de</strong> crisis r<strong>el</strong>igiosa que, con matices diversos, nos viene afectandoen Occi<strong>de</strong>nte en los últimos siglos.Sin entrar aún en sus causas y en un análisis más <strong>de</strong>tal<strong>la</strong>do <strong>de</strong> su<strong>de</strong>sarrollo —algo así intentaré en <strong>el</strong> capítulo siguiente— pue<strong>de</strong> ser interesantesugerir que podrían estar en lo dicho <strong>la</strong>s posibilida<strong>de</strong>s hierofánicasque mejor sobrevivirían a <strong>la</strong> crisis. La civilización tecnológica,que vivimos en <strong>el</strong> «mundo <strong>de</strong>sarrol<strong>la</strong>do» y que tien<strong>de</strong> a imp<strong>la</strong>ntarsep<strong>la</strong>netariamente, parece cegar no pocas fuentes hierofánicas d<strong>el</strong> pasado.No sólo hace menos urgentes los recursos a <strong>la</strong> «r<strong>el</strong>igión estática» —locual pue<strong>de</strong> juzgarse un progreso humano y r<strong>el</strong>igioso—, sino que hacecon <strong>el</strong>lo menos viables muchas experiencias r<strong>el</strong>igiosas que iban ligadasa esos recursos. Sabemos hoy que este «<strong>de</strong>sencantamiento» o «<strong>de</strong>sacralización»d<strong>el</strong> mundo no es tan simple como pudo parecer <strong>de</strong>s<strong>de</strong> visiones<strong>de</strong>masiado lineales <strong>de</strong> una evolución racionalizadora. Hay renacimientoscontinuos <strong>de</strong> sacralidad polimorfa, un continuo «reencantamiento»añorante. Pero sabemos también que tal fenómeno es, a su vez, muyambiguo. Añora también los recursos <strong>de</strong> <strong>la</strong> r<strong>el</strong>igión estática; más aún, sereviste a veces <strong>de</strong> marcados tintes mágicos.¿Son posibles, aún hoy, para <strong>el</strong> hombre ilustrado y maduro, auténticasexperiencias r<strong>el</strong>igiosas no tan afectadas por esos riesgos? Hay que<strong>de</strong>cir, por una parte, que no se ve hayan <strong>de</strong> darse d<strong>el</strong> todo por cegadas<strong>la</strong>s fuentes <strong>de</strong> hierofanías naturales, hoy cuando hemos aprendido a152

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!