12.07.2015 Views

El Enigma y el Misterio: Una Filosofía de la Religión

El Enigma y el Misterio: Una Filosofía de la Religión

El Enigma y el Misterio: Una Filosofía de la Religión

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

d i o s , « s e ñ o r d e l a h i s t o r i a »nes que, en su <strong>de</strong>spliegue temporal, <strong>el</strong> creyente verá como «actuacionesprovi<strong>de</strong>nciales»; sin que <strong>la</strong> mente humana pueda ir más allá <strong>de</strong> afirmarlos hechos y su convicción sobre <strong>la</strong> fundamentación.En ambas hipótesis Dios es eterno (en <strong>el</strong> sentido fuerte <strong>de</strong> atemporal),lo que ya establece una distancia frente a <strong>la</strong> concepción literalistaque postu<strong>la</strong>ría una interacción <strong>de</strong> Dios con <strong>el</strong> creyente semejante a <strong>la</strong>sinteracciones cósmicas. Con <strong>el</strong>lo, <strong>la</strong> diferencia entre <strong>la</strong>s dos hipótesis noes tan gran<strong>de</strong> que haga a <strong>la</strong> segunda esencialmente más difícil <strong>de</strong> aceptarpara <strong>el</strong> creyente. Quizá, entonces, tal diferencia se hace más sutil quer<strong>el</strong>evante.<strong>El</strong> <strong>de</strong>bate que se entab<strong>la</strong>ra podría ser muy <strong>la</strong>rgo. Analizadas en símismas, (a) queda menos lejos <strong>de</strong> lo que supone <strong>el</strong> que vive <strong>la</strong> fe en <strong>la</strong>Provi<strong>de</strong>ncia: <strong>la</strong> distinción <strong>de</strong> una doble fundamentación (<strong>de</strong> una pauta«normal» y <strong>de</strong> sus «alteraciones») pue<strong>de</strong> tranquilizarlo. (Y es muy comprensibleque, como en tantos otros puntos, en <strong>la</strong> opción teórica <strong>de</strong> cadacual tengan peso factores extrateóricos.) Probablemente <strong>la</strong>s mentes máscríticas y filosóficamente configuradas se inclinarán por (b), encontrandomás a<strong>de</strong>cuada esa concepción más simple; y que, en su renuncia aintentar saber mucho sobre Dios, es más fi<strong>el</strong> a su trascen<strong>de</strong>ncia.Unos y otros podrán convenir en que no cabe <strong>de</strong>mostrar (con razonesestrictas, <strong>de</strong> or<strong>de</strong>n lógico o metafísico) <strong>la</strong> total inviabilidad <strong>de</strong>ninguna <strong>de</strong> <strong>la</strong>s dos hipótesis. Esto es más patente respecto <strong>de</strong> (b): esaconcepción no aña<strong>de</strong> nueva dificultad a <strong>la</strong> que tiene <strong>la</strong> misma fe en Dioscreador. Contra (a) no valdría objetar que no fuera, por principio, coherentecon los atributos metafísicos <strong>de</strong> Dios; pues tal objeción podríaextrapo<strong>la</strong>rse contra toda <strong>la</strong> concepción <strong>de</strong> <strong>la</strong> «creación» como actuaciónamorosa. Sí podría preguntarse si es «digna <strong>de</strong> lo Absoluto» <strong>la</strong> imagenque resulta, en <strong>la</strong> que hay que imaginarlo rectificando su actuación «normal»con «alteraciones» (y <strong>de</strong> modo arbitrario). La fe monoteísta, alhacer hincapié en <strong>la</strong> atribución «Amor», postu<strong>la</strong> que sea verdad <strong>de</strong> parte<strong>de</strong> Dios <strong>la</strong> r<strong>el</strong>ación amorosa d<strong>el</strong> creyente; pero no se ve que <strong>el</strong>lo incluya<strong>el</strong> postu<strong>la</strong>r esa imagen que incluye rectificaciones. Hay un cierto déficitmetafísico en <strong>la</strong> tesis (a); aunque no tal que <strong>la</strong> refute inequívocamente.Admitido esto, <strong>el</strong> <strong>de</strong>bate queda más bien a <strong>la</strong> discreción <strong>de</strong> <strong>la</strong>s variasposibles «teologías» que lo abor<strong>de</strong>n <strong>de</strong>s<strong>de</strong> <strong>el</strong> creyente y sus presupuestosvitales. La filosofía <strong>de</strong> <strong>la</strong> r<strong>el</strong>igión preferirá, c<strong>la</strong>ro es, <strong>la</strong> tesis más austera.Dicho lo cual, podrá dar por cumplida su tarea <strong>de</strong> búsqueda y, unavez más, sin resultado <strong>de</strong>sfavorable a <strong>la</strong> p<strong>la</strong>usibilidad <strong>de</strong> <strong>la</strong> fe. Podrá,ulteriormente, sugerir al creyente y al teólogo <strong>la</strong> ventaja que presenta<strong>la</strong> concepción más austera por cuanto más simple y más respetuosa con<strong>el</strong> <strong>Misterio</strong> invocado como Dios. La concepción contrapuesta resultaatractiva porque pi<strong>de</strong> al creyente menos esfuerzo <strong>de</strong> reinterpretación605

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!