12.07.2015 Views

El Enigma y el Misterio: Una Filosofía de la Religión

El Enigma y el Misterio: Una Filosofía de la Religión

El Enigma y el Misterio: Una Filosofía de la Religión

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

S O B R E L A P L A U S I B I L I D A D f i l o s ó f i c a D E L A F E E N D I O Sbre <strong>el</strong> mundo. Aquí nos concierne cómo se r<strong>el</strong>aciona esa convicción sobr<strong>el</strong>a t<strong>el</strong>eología cósmica con <strong>la</strong> visión que tienen <strong>la</strong>s ciencias.Hasta no hace mucho tiempo era éste un terreno <strong>de</strong> predilecciónpara <strong>la</strong>s filosofías que buscaban encontrar base empírica a <strong>la</strong> fe. Recuér<strong>de</strong>se<strong>el</strong> argumento» d<strong>el</strong> <strong>de</strong>signio», presentado tan <strong>el</strong>ocuentemente por<strong>el</strong> personaje Cleantes en los Diálogos <strong>de</strong> David Hume; y d<strong>el</strong> que Kantescribió en su Crítica: «es siempre digno <strong>de</strong> ser mencionado con respeto,como <strong>el</strong> más antiguo, <strong>el</strong> más c<strong>la</strong>ro y más acomodado a <strong>la</strong> comúnrazón humana» 57 . Iba referido ante todo, por supuesto, a los vivientesd<strong>el</strong> p<strong>la</strong>neta Tierra. Parecía evi<strong>de</strong>nte que son empíricamente constatablesmúltiples r<strong>el</strong>aciones t<strong>el</strong>eológicas en ese ámbito. Des<strong>de</strong> <strong>la</strong>s cuales es yaposible argumentar positivamente en favor <strong>de</strong> <strong>la</strong> existencia <strong>de</strong> una Int<strong>el</strong>igenciaor<strong>de</strong>nadora. Puso ya Kant, en <strong>el</strong> pasaje aludido, serias reservasa que por ese camino se llegara a Dios. En ulteriores reflexiones en <strong>la</strong>Crítica d<strong>el</strong> juicio, rebajó incluso más <strong>el</strong> alcance d<strong>el</strong> argumento. Rechazaba,<strong>de</strong>s<strong>de</strong> luego, como irracional una simple ap<strong>el</strong>ación al azar; peroañadiendo que podría bastar una causa no azarosa pero inmanente y noint<strong>el</strong>igente (algo así como un «alma d<strong>el</strong> mundo»), sin necesidad <strong>de</strong> llegara una Int<strong>el</strong>igencia 58 .Recientemente, como sabemos, <strong>la</strong>s críticas a <strong>la</strong> ap<strong>el</strong>ación t<strong>el</strong>eológicase han hecho mucho más radicales. La teoría canónica para explicar <strong>la</strong>evolución (<strong>el</strong> «neo-darwinismo») cuenta con que los mutantes afortunados(que acabarán triunfando en <strong>la</strong> «s<strong>el</strong>ección natural») se producen,al igual que otros muchos no afortunados, por «azar»: como casualeserrores <strong>de</strong> transcripción en <strong>la</strong>s secuencias <strong>de</strong> ADN que forman <strong>el</strong> códigogenético. Pero ya indiqué que no todos los científicos y filósofos d<strong>el</strong>a biología tienen hoy esto por suficiente. Muchos ap<strong>el</strong>an, adoptandoulteriormente un ángulo <strong>de</strong> visión más holista, a una «direccionalidad»<strong>de</strong> los procesos vitales.La presencia <strong>de</strong> ese factor «direccionalidad» es muy c<strong>la</strong>ra cuandose consi<strong>de</strong>ra <strong>la</strong> compleja estructuración interna y <strong>el</strong> funcionamiento integral<strong>de</strong> cada organismo viviente. Pero se extien<strong>de</strong> también <strong>de</strong> algúnmodo al mismo <strong>de</strong>sarrollo d<strong>el</strong> phylum evolutivo. Como ya recordé, <strong>el</strong>mismo Jacques Monod reconoció que en <strong>la</strong> <strong>de</strong>scripción <strong>de</strong> los procesosvitales, unos y otros, hay que contar con lo que l<strong>la</strong>mó «t<strong>el</strong>eonomía». La<strong>el</strong>ección <strong>de</strong> este término me parece incluía un doble reconocimiento.57. I. Kant, Crítica <strong>de</strong> <strong>la</strong> razón pura, A 623 = B 652. Las críticas que hace Humeal argumento, por boca d<strong>el</strong> personaje Filón, <strong>la</strong>s presenté resumidas en <strong>la</strong> exposición d<strong>el</strong>capítulo quinto.58. I. Kant, Crítica d<strong>el</strong> juicio, parágrafos 81 y 82. Lo insinuado por Kant, comoalternativa pensable que anu<strong>la</strong>ría <strong>la</strong> fuerza argumentativa, no queda quizá lejos <strong>de</strong> <strong>la</strong>«Naturaleza naturante»...536

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!