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REVISTA LIBERTADOR O'HIGGINS - Instituto Ohigginiano

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Edición c o n m E m o r a t i v a dE l Bi c E n t E n a r i o<br />

una organización institucional sustentable, es decir, fijar los nuevos Estados y<br />

sus opciones de gobernabilidad. Además de una guerra de descolonización, la<br />

emancipación hispanoamericana fue también una serie de guerras civiles, sobre<br />

todo entre liberales y absolutistas, pero también entre caudillos o entre diferentes<br />

tendencias para ejercer el poder. Es importante recalcar que la emancipación<br />

no se puede reducir a una guerra de “criollos liberales” frente a “españoles<br />

realistas”, como lo presenta la versión mítica popular, sino que, en ambos lados<br />

del Atlántico, fue sobre todo la lucha entre el deseo emancipador de democracia<br />

contra el poder aplastante de la tiranía del régimen absolutista. La Junta de<br />

Sevilla y el movimiento de resistencia a la usurpación del trono por Bonaparte<br />

fueron dirigidos por el liberalismo peninsular que llamó a los criollos a unirse al<br />

movimiento (diciembre de 1808 y enero de 1809). Lo que implicaba una ruptura<br />

del régimen político, con la aplicación del concepto de soberanía popular y las<br />

elecciones de representantes al Congreso Constituyente de Cádiz y a las Cortes.<br />

El trabajo constitucional que produjo el Código Político de 1812 (la Constitución<br />

liberal de Cádiz) fue el resultado tanto de peninsulares como de criollos, que<br />

juntos defendieron la introducción de principios democráticos fundamentales. A<br />

esta lucha entre liberales y absolutistas se agregó, desde 1809, un debate político<br />

entre liberales peninsulares y liberales criollos. Los representantes americanos<br />

sostenían, con razón, que eran jurídicamente súbditos de Fernando VII y no de<br />

los españoles peninsulares, sus reinos estando vinculados a la monarquía y no al<br />

gobierno de España, en tanto que la Junta Central, el Consejo de Regencia y las<br />

Cortes pretendían gobernar y legislar para ambos lados del Atlántico.<br />

La revolución de los criollos americanos fue así una consecuencia de la guerra<br />

en España, que ofrecía la ocasión “forzada” de asumir el absoluto control político<br />

y económico de sus provincias. Los criollos no podían obedecer a un usurpador<br />

extranjero (José Bonaparte), ni a un rey prisionero (Fernando VII), ni tampoco a<br />

los españoles en lucha (la Junta Central y el Consejo de Regencia). Esta última<br />

opción hubiera significado, en los territorios americanos, reforzar el poder de<br />

la clase minoritaria de los funcionarios españoles sobre la aristocracia criolla, y<br />

agudizar así el problema de desigualdad entre peninsulares y americanos que<br />

daba origen al afán autonomista. Sin embargo, la fórmula generalmente elegida<br />

de ruptura con la metrópoli, mediante juntas de gobierno autónomas pero súbditas<br />

del rey cautivo, quitaba el poder a los residentes peninsulares, agudizando el<br />

conflicto de intereses entre estos dos componentes de la clase dominante. Eso<br />

explica que, en varios casos, la guerra de emancipación fue una guerra civil entre<br />

estos dos bandos.<br />

Además, esta guerra de independencia política tomó distintas orientaciones.<br />

Con la autonomía, los ricos criollos de las provincias con mayoría de mestizos,<br />

indios, pardos y esclavos enfrentaban el riesgo de perder sus privilegios, al<br />

no poder contener las crecientes demandas de participación de otros grupos<br />

sociales. Los ejemplos de los excesos de la Revolución Francesa y de las más<br />

cercanas experiencias de Coro (1795) y de Haití (1802) ejercen sobre ciertas<br />

provincias (México, América Central, Venezuela, Perú y Alto Perú), un efecto de<br />

cohesión en los dos bandos por temor al cambio social. En La Paz, en 1809, y<br />

sobre todo en México, de 1810 hasta 1815, fue una revolución social y racial de<br />

los indios y mestizos en contra de los terratenientes blancos. En otras partes fue<br />

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