08.05.2013 Views

REVISTA LIBERTADOR O'HIGGINS - Instituto Ohigginiano

REVISTA LIBERTADOR O'HIGGINS - Instituto Ohigginiano

REVISTA LIBERTADOR O'HIGGINS - Instituto Ohigginiano

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Ev i s t a li B E r t a d o r o’higgins<br />

El primero, está dado por el ideario que nos legara O’Higgins en su condición<br />

de fundador de la República, que sigue constituyendo el basamento de nuestra<br />

democracia.<br />

El segundo, radica en el hecho que son sociedades que se enfrentan a cambios<br />

profundos.<br />

La de los tiempos del prócer, vivió el derrumbe del denominado “antiguo<br />

régimen”, con la caída de las viejas monarquías, bajo los postulados de la<br />

revolución francesa, exportados por las fuerzas napoleónicas en el viejo continente,<br />

y su consiguiente repercusión en América. La entronización de las ideas liberales,<br />

aún cuando en Europa sufrieran un estancamiento a partir de 1815 y que duraría<br />

hasta mediados de ese siglo, se derramaron por nuestro continente con fuerza<br />

incontenible y con un carácter irreversible.<br />

O’Higgins fue espectador y actor de ese cambio, administrándolo con prudencia<br />

como gobernante, frente a una sociedad que no estaba culturalmente preparada<br />

para asumirlo y en la que los “ciudadanos” capaces de ejercer sus derechos eran<br />

una franca minoría.<br />

La sociedad actual, por el contrario, está constituida por una masa ciudadana,<br />

consiente de sus derechos y de sus potencialidades, pero que también se<br />

enfrenta a un cambio estructural, en el cual la globalización y la tecnología han<br />

revolucionado todos los ámbitos de acción, a una velocidad tal, que supera con<br />

creces nuestras capacidades de asimilación.<br />

El cambio trae aparejado la pérdida de las certezas, en las cuales se han<br />

desenvuelto las sociedades, y ante ello, éstas recurren a elementos básicos que<br />

les permitan reafirmar sus creencias y principios, en la necesidad de compartir<br />

una identidad propia.<br />

Ante un mundo que se derrumbaba, O’Higgins nos entregó una identidad<br />

nacional, que estableció por decreto 6 . A partir de ese momento, comenzamos a<br />

ser Chilenos, dejando de ser españoles americanos. En reemplazo de la imagen<br />

casi divina de un monarca intangible, nos dio un ordenamiento constitucional,<br />

separando el ejercicio de los poderes y autolimitando el suyo propio 7 . Nos<br />

hizo iguales, desechando títulos y castas 8 , igualdad que también la llevó a<br />

los cuarteles, al consignar en el decreto de fundación de la Academia Militar,<br />

que para incorporarse a ella “no se exigen más pruebas de nobleza que las<br />

verdaderas que forman el mérito, la virtud y el patriotismo” 9 . Sentó las bases para<br />

que cada habitante pudiese experimentar sus propias capacidades de desarrollo<br />

y progreso. Abrió nuestros puertos al comercio mundial. Propició la educación<br />

general. Sacrificó su fortuna personal, poniendo todos sus bienes a disposición<br />

de la causa independentista, demostrando con ello su espíritu cívico, al servicio<br />

del bien común, por sobre los intereses personales. Reconoció como iguales y<br />

paisanos, a todos los habitantes del país, incluyendo en esa igualdad a las etnias<br />

6 Decreto del 3 de junio de 1818; O’Higgins, lrizarri.<br />

7 Constituciones de 1818 y 1822.<br />

8 Decreto de 15 de septiembre de 1817; O’Higgins, Fernández<br />

9 Decreto de 16 de marzo de 1817; O’Higgins, Zenteno.<br />

576

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!