REVISTA LIBERTADOR O'HIGGINS - Instituto Ohigginiano

Edición c o n m E m o r a t i v a dE l Bi c E n t E n a r i o
PROYECCIÓN GEOPOLÍTICA Y ESTRATÉGICA
DE BERNARDO O’HIGGINS
Juan Carlos Vega Manríquez 1
1. DURANTE EL PERÍODO DE LA PATRIA VIEJA
En América durante el período de la colonia española, el comercio exterior era
monopolio exclusivo de la Corona de España. El intercambio comercial externo
era realizado a través de la complicada y demorosa vía que unía el Mar Caribe,
Panamá y el puerto de El Callao, donde la actividad naviera estaba reservada
sólo para satisfacer los intereses del Virreinato del Perú, cuyo centro de poder se
radicaba en Lima.
Lo anterior dejaba a la Capitanía General de Chile, limitada a un simple porteo
marítimo de cargas dentro de los incipientes puertos, a la pesca artesanal y a las
actividades ilícitas de contrabando, todo lo cual estaba enmarcado en una casi
inexistente conciencia nacional sobre los intereses marítimos.
Por esta razón, en los débiles inicios de la Patria Vieja, don Bernardo O’Higgins
al opinar sobre funciones de gobierno con apenas 32 años de edad, pero apoyado
con una educación excepcional ya consolidada, tenía una clara visión del principal
problema que impedía el despegue del país, el cual radicaba básicamente en su
aislamiento comercial del resto del mundo. En consecuencia, impulsó a Don Juan
Martínez de Rozas, miembro de la Junta de Gobierno, para adoptar dos medidas
esenciales para revertir esta situación y desarrollar el comercio exterior de Chile.
Estas eran las de crear un Congreso Nacional y decretar la libertad de comercio.
Así, el 21 de Febrero de 1811 una de las primeras medidas de la Junta de
Gobierno, fue decretar la libertad de comercio exterior a todas las banderas
amigas a través de los mayores puertos del país, como lo eran los puertos de
Coquimbo, Valparaíso, Talcahuano y Valdivia, abriéndolos al comercio mundial y
dejando en tal sentido, sin efecto la prohibición de la Corona Española.
En el transcurso de este proceso y ante el inesperado éxito dio la apertura
comercial de Chile, el Virrey del Perú don Fernando de Abascal (1811-1812) quiso
evitar esta amenaza para los privilegios comerciales del virreinato y contrató
buques corsarios para bloquear los puertos Chilenos e impedir el libre comercio
a través de las rutas marítimas. Además, el temor del Virrey iba más allá de lo
1 Coronel del Ejército de Chile. Jefatura del Estado Mayor General del Ejército.
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