REVISTA LIBERTADOR O'HIGGINS - Instituto Ohigginiano

Edición c o n m E m o r a t i v a dE l Bi c E n t E n a r i o
extranjeros, en su mayoría ingleses y norteamericanos. Blanco Encalada con el
grado de Contralmirante quedó como el segundo en el mando de la Escuadra 21 .
La primera incursión de la Escuadra hacia el norte a las costas peruanas,
tuvo un fallido ataque por sorpresa al puerto fortificado de El Callao, quedando
entonces Blanco Encalada con cuatro buques a cargo de su bloqueo. Luego, Lord
Cochrane incursionó aún más al norte hasta Guayaquil, mientras Blanco Encalada
por problemas de suministros de víveres regresó a Valparaíso, levantando el
bloqueo a El Callao 22 .
Al regreso de Lord Cochrane a Valparaíso, la Escuadra se reabasteció para otra
campaña marítima al litoral peruano y se reforzó con la corbeta “independencia”,
recién adquirida a Estados Unidos. Sin embargo, la alarmante noticia de la
próxima salida desde Cádiz de una expedición armada con tres buques de guerra
y una fuerza de 20.000 hombres con destino a América, postergó el zarpe de la
fuerza naval 23 .
A raíz de lo mismo, el General San Martín que se encontraba en Mendoza, fue
llamado a Buenos Aires para asumir el mando de las fuerzas armadas argentinas,
proponiendo a su vez a O’Higgins la idea que la Escuadra Chilena se trasladara
al Atlántico, para destruir esta nueva amenaza mientras se encontraba en viaje
a América, considerando la facilidad que presentaba esta empresa en alta mar,
contando con la seguridad que esta expedición se compondría de muchos
transportes de tropas y de pocos navíos de guerra 24 .
Lord Cochrane de inmediato se opuso al plan de San Martín, argumentando
que al trasladarse la Escuadra Chilena al Atlántico, dejaría el dominio del Pacífico
al Virreinato del Perú, lo cual posibilitaría una nueva tentativa de reconquista de
Chile, considerando que España aún mantenía importantes fuerzas coloniales
desplegadas en las costas del Pacífico, tanto en Lima como en el sur del territorio
Chileno. O’Higgins estuvo de acuerdo y la respuesta a San Martín fue negativa 25 .
Afortunadamente, la nueva expedición española terminó en un completo fracaso
y la Escuadra Chilena bien abastecida pudo materializar una segunda incursión
armada a El Callao, esta vez con siete navíos de guerra y dos mercantes. Sin
embargo, los realistas habían reforzado las defensas, transformando al puerto en
inexpugnable ante un ataque por mar 26 .
Debido a lo anterior, Cochrane cambió de estrategia para debilitar a los
españoles en el Pacífico y aprovechó esta incursión al litoral peruano, para
capturar el puerto de Pisco y capturar en el Río Guayaquil dos fragatas mercantes
armadas en guerra. A continuación, regresó a Chile y mandó a Valparaíso a parte
de sus buques con los navíos apresados, mientras él siguió navegando hacia
el sur en un reconocimiento hasta Valdivia. Después, coordinó con el General
Freire, quién estaba a cargo de la campaña terrestre contra los realistas en el sur,
21 lbíd., p. 169.
22 Ibíd.
23 Ibíd., p. 170.
24 Ibíd.
25 Ibíd.
26 lbíd., p. 171.
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