08.06.2013 Views

Tertia Pars - Suma Teológica

Tertia Pars - Suma Teológica

Tertia Pars - Suma Teológica

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

234 Tratado del Verbo encarnado C.23 a.2<br />

3. A la tercera hay que decir: Los bienes<br />

espirituales pueden ser poseídos por muchos<br />

a la vez, pero no los bienes corporales.<br />

Y por eso nadie puede recibir la herencia<br />

material hasta que se convierte en sucesor<br />

del que muere. En cambio, la herencia espiritual<br />

puede ser participada íntegramente<br />

por muchos a la vez, sin perjuicio alguno<br />

del Padre, que vive para siempre.<br />

Pudiera decirse, sin embargo, que Dios<br />

se aparta en cuanto existente en nosotros<br />

por medio de la fe, para comenzar a estar<br />

presente por la visión, como dice la Glosa 2<br />

comentando Rom 8,17: Si hijos, también herederos.<br />

ARTICULO 2<br />

El adoptar, ¿corresponde a toda la<br />

Trinidad?<br />

Supra q.3 a.4 ad 3; In Sent. 3 d.10 q.2 a.l q."2 y 3.<br />

Objeciones por las que parece que el<br />

adoptar no corresponde a toda la Trinidad.<br />

1. En Dios se habla de adopción por<br />

analogía a lo que acontece entre los hombres.<br />

Pero entre los hombres solamente<br />

corresponde el adoptar a aquel que puede<br />

engendrar hijos. Y esto, en Dios, únicamente<br />

compete al Padre. Luego, en la Divinidad,<br />

sólo el Padre puede adoptar.<br />

2. Aún más: mediante la adopción, los<br />

hombres se convierten en hermanos de<br />

Cristo, según las palabras de Rom 8,29: Para<br />

que El sea el primogénito entre muchos hermanos.<br />

Pero se llama hermanos a los que son hijos<br />

de un solo padre, por lo que el Señor dice<br />

en Jn 20,17: Subo a mi Padre y a vuestro Padre.<br />

Luego solamente el Padre de Cristo tiene<br />

hijos adoptivos.<br />

3. Y también: en Gal 4,4-6 se dice: Dios<br />

envió a su Hijo para que recibiésemos la adopción<br />

de hijos de Dios. Y, puesto que sois hijos de Dios,<br />

envió Dios a nuestros corazones el Espíritu de su<br />

Hijo que grita: Abba, Padre. Luego el adoptar<br />

es propio de aquel que posee al Hijo y al<br />

Espíritu Santo. Pero esto es exclusivo de la<br />

persona del Padre. Luego el adoptar solamente<br />

corresponde a la persona del Padre.<br />

En cambio está que el adoptarnos como<br />

hijos compete a aquel a quien podemos<br />

llamar Padre; por ello se escribe en Rom<br />

8,15: Habéis recibido el Espíritu de adopción de<br />

hijos, en el que gritamos: Abba, Padre. Pero,<br />

2. Glossa ordin. (VI,19 A); Glossa LOMBARDI: ML 191,1441.<br />

cuando llamamos a Dios Padre nuestro, nos<br />

referimos a toda la Trinidad, como sucede<br />

también con los demás nombres que se<br />

predican de Dios en relación con las criaturas,<br />

según hemos expuesto en la Primera<br />

Parte (q.33 a.3 arg.l; q.45 a.6 en cambio).<br />

Luego el adoptar compete a toda la Trinidad.<br />

Solución. Hay que decir: Entre el hijo<br />

adoptivo de Dios y el Hijo de Dios por<br />

naturaleza media esta diferencia: El Hijo<br />

natural de Dios es engendrado y no hecho,<br />

mientras que el hijo adoptivo es hecho,<br />

según palabras de Jn 1,12: Les dio poder para<br />

hacerse hijos de Dios. Sin embargo, alguna vez<br />

se dice que el hijo adoptivo es engendrado<br />

a causa de la regeneración espiritual, que es<br />

gratuita, no natural; por eso se lee en Sant<br />

1,18: Nos engendró voluntariamente por la palabra<br />

de la verdad. Y aunque, en Dios, el<br />

engendrar sea propio de la persona del<br />

Padre, producir cualquier efecto en las criaturas<br />

es, sin embargo, común a toda la<br />

Trinidad, a causa de la unidad de naturaleza,<br />

pues donde hay una sola naturaleza es necesario<br />

que haya un solo poder y una sola<br />

operación. Por eso dice el Señor en Jn 5,19:<br />

Lo que hace el Padre, lo hace igualmente el Hijo.<br />

Y, por lo tanto, adoptar a los hombres<br />

como hijos de Dios corresponde a toda la<br />

Trinidad.<br />

Respuesta a las objeciones: 1. A la<br />

primera hay que decir: Todas las personas<br />

humanas no tienen numéricamente una sola<br />

naturaleza, de modo que sea necesario que<br />

tengan todas una sola operación y un solo<br />

efecto, como sucede en Dios. Y por eso, en<br />

este aspecto, no puede defenderse una analogía<br />

en uno y otro caso.<br />

2. A la segunda hay que decir. Nosotros,<br />

en virtud de la adopción, nos convertimos<br />

en hermanos de Cristo, como que tenemos<br />

el mismo Padre que El. Pero Dios es Padre<br />

de Cristo de una manera, y es Padre nuestro<br />

de otra manera distinta. Por eso, de forma<br />

clara, dijo el Señor en Jn 20,17: Mi Padre y,<br />

separadamente, vuestro Padre. Efectivamente,<br />

Dios es Padre de Cristo por generación<br />

natural, que es lo distintivo de éste; mientras<br />

que es Padre nuestro al hacer voluntariamente<br />

algo que le es común con el Hijo<br />

y con el Espíritu Santo. Y, por eso, Cristo<br />

no es hijo de toda la Trinidad, como lo<br />

somos nosotros.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!