14.05.2013 Views

tenor pedro lavirgen. trayectoria de una voz - Helvia :: Repositorio ...

tenor pedro lavirgen. trayectoria de una voz - Helvia :: Repositorio ...

tenor pedro lavirgen. trayectoria de una voz - Helvia :: Repositorio ...

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Tenor Pedro Lavirgen. Trayectoria <strong>de</strong> <strong>una</strong> <strong>voz</strong><br />

116<br />

El ejercicio <strong>de</strong> la docencia como maestro en <strong>una</strong> escuela <strong>de</strong> Madrid fue<br />

posible por la experiencia que como maestro había adquirido en su pueblo natal.<br />

Durante el año escolar <strong>de</strong> 1955/56 pudo simultanear el trabajo <strong>de</strong>l coro con la<br />

escuela que se encontraba en el barrio <strong>de</strong>l Estrecho. Salía a las cinco <strong>de</strong> la tar<strong>de</strong>,<br />

tomaba un taxi hasta la calle <strong>de</strong>l Este don<strong>de</strong> estaba Radio Nacional y llegaba con<br />

los minutos justos para iniciar el ensayo a las cinco y media. 224<br />

Pero el siguiente curso fue nombrado maestro <strong>de</strong> <strong>una</strong> escuela <strong>de</strong> Morata <strong>de</strong><br />

Tajuña, para lo que tenía que <strong>de</strong>splazarse <strong>de</strong>s<strong>de</strong> Madrid. Entonces comprobó que<br />

ambos trabajos eran incompatibles:<br />

“El trabajo en la Escuela empezó pareciéndome difícil y perjudicial para<br />

mi garganta, y continuó siéndolo, hasta que no tuve más remedio que<br />

abandonarlo, si quería ser cantante. Cinco horas luchando con críos que me<br />

crispaban los nervios y hacían que me quedase casi afónico; para <strong>de</strong>spués <strong>de</strong><br />

terminar salir corriendo a la Radio y seguir forzando mi garganta durante dos<br />

horas más. Esto hubiese acabado con mi laringe.” 225<br />

A las circunstancias anteriores hay que añadir que el trabajo vocal que<br />

mantiene con el profesor Pérez Flores llega a un límite insostenible. A finales <strong>de</strong><br />

abril 1956 su laringe se niega, completa y peligrosamente agotada, a emitir unos<br />

sonidos, ni siquiera hablados:<br />

“A pesar <strong>de</strong> este trabajo, si mi impostación hubiese ido acertada, hubiese<br />

sido contrarrestado este esfuerzo; pero lejos <strong>de</strong> esto, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> cantar en la<br />

Radio, me iba a casa <strong>de</strong>l señor Pérez Flores a gritar como un energúmeno.” 226<br />

Afort<strong>una</strong>damente, tras el diagnóstico <strong>de</strong> un principio <strong>de</strong> nódulo por<br />

agotamiento y <strong>de</strong>fectuosa emisión y guardar veinte días <strong>de</strong> silencio absoluto, se<br />

224 Véase GÓMEZ-SANTOS, M.: “Pedro Lavirgen cuenta su vida (II). El sacrificio <strong>de</strong> mi padre<br />

me permitió estudiar”, en: Ya, 21 enero 1976, p. 40.<br />

225 Í<strong>de</strong>m.<br />

226 Diario personal <strong>de</strong> Pedro Lavirgen.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!