14.05.2013 Views

tenor pedro lavirgen. trayectoria de una voz - Helvia :: Repositorio ...

tenor pedro lavirgen. trayectoria de una voz - Helvia :: Repositorio ...

tenor pedro lavirgen. trayectoria de una voz - Helvia :: Repositorio ...

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Tenor Pedro Lavirgen. Trayectoria <strong>de</strong> <strong>una</strong> <strong>voz</strong><br />

triunfó. Pudo <strong>de</strong>mostrar a los <strong>de</strong>más, no solamente el talento musical y sus<br />

cualida<strong>de</strong>s vocales e interpretativas, sino la irresistible fuerza interior que supone<br />

el servicio a <strong>una</strong> vocación, a <strong>una</strong> forma <strong>de</strong> vida a la que sirve y para la que vive<br />

casi religiosamente. Para entonces contaba con cuarenta y cinco años <strong>de</strong> edad.<br />

656<br />

Cantar la durísima aria Celeste Aida en el contexto <strong>de</strong> la representación <strong>de</strong><br />

la ópera, tiene para el oyente <strong>de</strong> <strong>una</strong> grabación discográfica un problema, como es<br />

el enfrentamiento con dos realida<strong>de</strong>s opuestas. Una, la objetiva en el comienzo<br />

casi inmediato con respecto a la función, en la que el <strong>tenor</strong> <strong>de</strong>be darlo todo sin<br />

apenas haber pisado el escenario. La otra es la realidad virtual a la que nos vamos<br />

acostumbrando cada vez más: “la realidad” <strong>de</strong> las grabaciones. En esta última, el<br />

cantante pue<strong>de</strong> hacer la toma las veces que quiera, o cantar un número <strong>de</strong> conjunto<br />

que le “caliente” la <strong>voz</strong>. En cambio, pisar las tablas <strong>de</strong>l escenario con el traje <strong>de</strong><br />

Radamés encima implica estar al 100% <strong>de</strong> faculta<strong>de</strong>s para po<strong>de</strong>r salir arioso: hay<br />

que dominar el legato en sostenidas frases <strong>de</strong> incómoda tesitura y en piano. Para<br />

colmo <strong>de</strong> males, tres si bemoles <strong>de</strong>ben darse, el último <strong>de</strong> los cuales cierra la<br />

pieza. Hacer arte y, por tanto, crear belleza con estos presupuestos es <strong>una</strong> empresa<br />

dura <strong>de</strong> la que nuestro <strong>tenor</strong> sale victorioso.<br />

Nuevamente nuestro cantante hace gala <strong>de</strong> un refinadísimo arte <strong>de</strong>l fraseo<br />

y <strong>de</strong> estilo. Su fiato nos remite a <strong>una</strong> escuela <strong>de</strong> canto –que hoy se nos antoja<br />

perdida– con la que pue<strong>de</strong> sostener el fraseo, así como el apianamiento <strong>de</strong> cada<br />

uno <strong>de</strong> sus finales. 563 La <strong>de</strong>nsidad y belleza tímbrica se pone <strong>de</strong> manifiesto <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

la primera frase Celesta Aida, en la que <strong>de</strong>be abarcar <strong>una</strong> octava a partir <strong>de</strong> la nota<br />

fa. Para ello mantiene el portamento sobre la vocal i (tal y como está escrito),<br />

perfectamente cubierto para dar el agudo sombreado. 564 El mismo proceso que<br />

sigue sobre el texto forma divina, con portamento sobre la i; y mistico serto, con<br />

563<br />

Un fragmento <strong>de</strong> Celeste Aida ofrecida en La Scala pue<strong>de</strong> escucharse en <strong>una</strong> <strong>de</strong> las pistas <strong>de</strong>l<br />

CD que hemos preparado.<br />

564<br />

Nuevamente Lavirgen nos viene a <strong>de</strong>mostrar que dominaba las notas <strong>de</strong> pasaje, apreciable por<br />

su emisión perfectamente redon<strong>de</strong>ada, con las notas sombreadas y no abiertas. Una comparación<br />

<strong>de</strong> cómo otros <strong>tenor</strong>es, con mayor o menor fort<strong>una</strong>, han resuelto vocalmente el inicio <strong>de</strong> Celeste<br />

Aida, pue<strong>de</strong> apreciarse en el estudio que ofrece REVERTER, A.: “El pasaje”. Scherzo. Año XIX.<br />

Nº 188, julio-agosto 2004, p. 136. Según las grabaciones que ha empleado para la elaboración <strong>de</strong>l<br />

artículo, Corelli resultaba antimusical; Jussi Björling se queda en <strong>una</strong> zona intermedia; Carlo<br />

Bergonzi atacaba abierto, más dulce que Tucker. Di Stefano y Nincola Monti cantaban abierto, con<br />

sonorida<strong>de</strong>s tan poco canónicas y escasamente musicales.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!