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gados de lo que suelen ser normalmente, y las
lumbres más reducidas , con estrechez de la
corona. Ese defecto se corrige herrando bien
á los brutos.
ALTEAMTJZ (Lupinus albiis, L.).—El
altramuz cultivado, ó Lupinus albus (figu-
\ Vt '
VJ
Figura 81.—Altramuz amarillo
ra 80), tiene cualidades respecto del clima que
no se observan en el silvestre, que se cría en
varios sitios de España, especialmente en los
términos de Fuencarral, Alcobendas, Valdelamasa,
etc., donde lo hemos visto. Su flor es
azul ó amarilla. El cultivado se hiela en la
región central; los otros resisten.
En Andalucía y Extremadura se cultiva el
altramuz en turno de barbecho semillado. Su
raíz es leñosa y profundiza bastante; su tallo
fuerte, recto, ramoso, de 50 á 60 centímetros
de alto, velloso; sus hojas alternas, digitadas,
verticiladas; estípulas adheridas al pecíolo por
su base; flores grandes, numerosas y blancas.
Legumbre coriácea, oblonga, saliente y comprimida,
con nudosidades oblicuas y semillas
separadas por el tejido celular,
aplastadas.
Su cultivo es el mismo que
se emplea para todas las semillas;
labor de otoño sobre cereales;
siembra un surco sí y
otro no, para labrar después
las partes interlineales, que
casi ocupa la planta; se siembran
en Febrero, y su madurez
es tardía para Septiembre.
Si el país es propenso á heladas
, hay que recogerlos antes
que ocurran.
*• Nosotros los hemos sembra­
do en Marzo en la región central
(Morata de Tajuña, 6 leguas
al Este de Madrid), y se
• han helado en Abril y Mayo,
obteniendo resultados muy
} medianos. Los terrenos areniscos
calizos son los que más
le convienen, aunque prosperan
en los calizos arcillosos.
Se siembran en razón de hectolitro
por hectárea.
La simiente, puesta en agua
salada y quitada la parte
amarga, engorda mucho á los
cerdos. También se comen por
las personas puestos á endulzar
en agua salada. Los sembrados
de altramuces no los
comen las cabras y ovejas por
el amargo excesivo de la planta.
Si cuando están en flor se
entierran, sirven de excelente
abono al suelo. Las otras variedades
silvestres son:
Altramuz de semilla abigarrada
(Lupinus varias, íi.J.—
Esta variedad, que el célebre
Quer indica como silvestre en
las inmediaciones de Madrid,
nosotros no la hemos encontrado.
Cutanda dice también
lo mismo.
Altramuz esjiauol (Lupinus
hispanicus, B o i v.).—Flores
violado pálidas; se cría en Colmenar
Viejo y cerca del Escorial (Cutanda).
Altramuz amarillo (Lupinus luteus, Linneo)
(figura 81).—Especie fácil de distinguir
por sus flores amarillas olorosas, semillas de
color jiardo obscuro; se cría en la Casa de
Campo, El Pardo, etc.
Altramuz de hojas angostas (Lupinus angustifolia).—Esta
especie se cría silvestre en las
inmediaciones de Madrid, en la parte de I lortaleza,
etc. Es muy tardía la madurez del fruto;