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capas sobre un lecho de arcilla, y se corta
después en barras de diferente longitud y
tamaño.
En Turquía, Egipto, Marruecos y Argelia
se hace uso de los cocimientos y de las bebidas
preparadas directamente con el cáñamo
indio, y aun se suele masticar ó fumar como
si fuera tabaco, solo ó mezclado con otras
substancias. Por lo común, se utilizan y emplean
en el comercio, en vez de la planta, diversas
preparaciones con ella obtenidas. La
más enérgica que usan los árabes es el extracto
crasso, que se obtiene haciendo hervir con
manteca y agúalas sumidades del cáñamo verde.
Así que se evapora el agua, se cuela por
una tela la manteca fundida, y se obtiene de
esa manera un ungüento de color amarillo
verdoso, tenaz, de olor nauseabundo, característico
del aschisch, y de manteca rancia.
Generalmente se toman 2 ó 4 gramos del preparado
en infusión de café, ó en pildoras.
Con objeto de disfrazar el ingrato sabor
del aschisch, se suele mezclar con varias especies
de aromas, en cuyo caso se usa aquél en
más elevadas cantidades. El dava ó kavamesk,
ó sea una droga almizclada, de sabor agradable,
se obtiene mezclando el extracto crasso
con azúcar, canela, vainilla, alhócigo y almizcle.
A veces se adiciona también una
pequeña dosis de polvos de cantárida ó de
nuez vómica. Con el extracto crasso se obtiene
también una tintura alcohólica que se
utiliza para elaborar pastillas azucaradas. La
mayoría de esas preparaciones se fabrican
secretamente, y solamente se sabe que su
más importante ingrediente es el cáñamo.
El madjum, ó mejor madschum de los argelinos,
es una mezcla de miel con polvos del cáñamo
indiano, tostado ligeramente.
Todavía no se conoce bien cuál sea la composición
química del aschisch; sábese que
contiene una substancia resinosa llamada cannabina
ó aschischina, de la cual depende la
acción del cáñamo índico sobre el organismo.
En sentir de Personne, el aschisch contiene
también un aceite volátil, al cual se debe
atribuir parte de la acción que la planta ejerce;
pero esta última aserción había sido contradicha
por el hecho de que el agua destilada
del cáñamo es completamente inerte. Ese aceite
está formado por dos carburos de hidrógeno,
uno líquido, llamado cannábena, y otro
más rico en hidrógeno, y que es designado
con el nombre de hidruro de cannábena.
En estos últimos tiempos ha descubierto el
ya citado doctor Preobraschensky un cuerpo
que posee la propiedad de asimilarse el alcaloide.
Peltz ha hecho expresamente otras indagaciones,
de las cuales ha deducido que
existe en el aschisch una pequeña cantidad
de nicotina. Tratando el preparado de los
orientales con alcohol frío, extrajo una substancia
blanda y viscosa, en cantidad de un 30
por 100, y con el éter una resina casi semejante
á la substancia precedente, en la proporción
de 28 por 100. La nicotina reapare­
ció en el extracto acuoso, en los productos de
la destilación con el agua sola ó con agua
alcalizada, y en los de la destilación seca. De
150 gramos de sumidades floridas de la planta
obtuvo un hidrolato que contenía 25,4 miligramos
de nicotina. De 50 gramos destilados
con cal ó con potasa cáustica obtuvo un hidrolato
con 335,28 miligramos de nicotina. De
5 gramos de extracto de la Cannabis indica
disueltos en alcohol y destilados después, extrajo
91,44 miligramos de la base volátil. De
2 gramos del mismo producto, destilados con
cal y lejía de potasa, obtuvo 63,5 miligramos
de la base.
Los efectos del aschisch se manifiestan á la
media hora, ó á lo sumo á la hora de haber
sido ingerido en el estómago, según el temperamento
de las personas, del cual depende
también la intensidad de la acción, que es
mucho más enérgica cuando se toma el preparado
en ayunas, ó mezclado con café ó te.
Cual ocurre con todas las substancias de origen
vegetal que ejercen una acción muy pronunciada
sobre el organismo, el aschisch es
mucho más activo en los carnívoros y omnívoros
que en los herbívoros; de manera que
en éstos solamente con dosis elevadísimas se
obtienen los efectos apetecidos. Al igual del
opio y de otros muchos narcóticos, es á la vez
estimulante y embriagador á pequeñas dosis,
en tanto que á más elevadas dosis es calmante
y provoca el sueño.
La embriaguez voluptuosa (kief ó kif de
los árabes) producida por el aschisch es diferente
de la producida por el vino, el opio, y
en general de todos los narcóticos. Durante
el período de exaltación el individuo conserva
sus facultades intelectuales, y percibe y distingue
los objetos que le circundan, soporta
largo tiempo el ayuno y no experimenta las
incomodidades ocasionadas por otras substancias
embriagadoras. De Luca experimentó por
sí mismo la acción de ese alimento excitador
del sistema nervioso, y observó las mismas
sensaciones descritas por otros autores que
trataron del mismo asunto.
La primera acción del aschisch consiste en
una sensación especial de movimiento en las
extremidades del cuerpo; movimiento que se
propaga de fuera á dentro; parece que se percibe
la impresión de algo que penetra por los
dedos, y va propagándose y penetrando sin
interrupción hasta el cerebro, sin producir el
menor disturbio en las facultades intelectuales
ni la sensación más mínima de dolor. De Luca
compara esa sensación con la que producirían
muchas hormigas que recorriesen el cuerpo
del observador sin causarle mordeduras, ó á
la que se experimenta cuando se roza suave y
ligeramente la planta del pie, ó cualquiera
otra parte del cuerpo muy sensible y excitable.
Tales comparaciones, empero, solamente
dan una idea aproximada; el movimiento en
cuestión es continuo, progresivo y nada molesto
, conservando el hombre en los primeros
momentos el deseo de atender á sus habitúa-