código civil

DErJ DOMINIO DE r,AS COSAS ( ARTS. 2560, 2ón3, 2ó()4) 545
§ 7I8.-DE LAS COSAS SIN DCEÑO CONOCIDO. - PHCEfiA DI~ LA
PROPIEDAD DEI, TESORO
El tesoro no puede considerarse como res nullius, cuya propiedad
se adquiere por el primer ocupan te; ni tampoco como una
cosa abandonada, pro derelicto; porque el que la oeul tó lo hizo
con la intención de guardarla, y no de dejarla para el primer ocupante.
El tesoro encontrado se reclamará por el que justificare su
propiedad, y puede hacerlo, no sólo inmediatamente, sino durante
el término ordinario de los 10 y 20 años porque se prescriben las
acciones reales, y también las personales.
¿Qué clase de pruebas pueden darse? Se puede justificar la
propiedad del tesoro hallado pOl' el que se dice dueño, pOl'testigos,
presunciones, ó por cualquier otro qénero de prueba (art. 2564);
(Art.'2564.) La prueba de que lo encontrado no es tesoro es una
cuestión de hecho, y corresponde á los jueces resolverla según calla caso.
Se trata de un hecho simple, como es la ocultación de una cosa que el
propietario tenía derecho para hacer, y por consiguiente, su prueba no
puede restringirse á la de los actos jurídicos ó contratos; así puede demostrarse
por testigos, no, que presenciaran la ocultación, porque eso
rara vez puede hacerse ante otros, sino que sabían se había realizado, ó
conocieran la cosa encontrada; por presunciones, como en los casos del
articulo siguiente, tratándose de cosas modernas ó de reciente origen. El
dueño puede demostrar que era una cosa perdida que se le hubiera entorrmlo
ó escondido; pero entonces el desoubridor tiene derecho á una
recompensa por 01hallazgo. La prueba debo darse por el que reclama la
cosa encontrada.
¿El tesoro puele reclamarse en cualquier tiempo? ¿Es imprescriptible
esta acción? Así lo han creído alguno,.;, y parece desprenderse de la nota
del Dr. Velez-Sarsfield, al art. 3~14H; pero no creo quo esta opinión
pueda sostenerse, ni que importe e.-;a couclusión la nota á dicho artículo,
que d ica: en las cosas muables, val ieu lo la posesión por título, «no tenemos
prescripción de cosas muebles», citando en apoyo á Zacharia-,
§ H4D, nota G.
En mi opinión el Dr. Volez-~'hrsfield ha querido expresar lo que
este autor dice en el texto: que el principio de que la posesión vale por
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