miguel de unamuno frente al modernismo religioso - Gredos ...

de política eclesiástica con los de su programa 33 . Así, se hace evidente cómo en el
pensamiento de Buonaiuti y de sus prosélitos, o sea en su socialismo cristiano,
esta distinción, distinta de la corriente moderada democrática, está negada por
identificar la socialidad religiosa con toda forma de socialidad, y por anhelar a la
suprema identidad entre el más genuino cristianismo y las aspiraciones del
socialismo moderno y mundano. Este hecho también debió de constituir el punto
débil de la tendencia, ya que de ese modo deformó el concepto de hermandad
transmitido por la tradición cristiana en una aspiración socialista de tono,
sustancialmente, izquierdista. Lo que indujo al especialista del tema Pietro
Scoppola a juzgar el planteamiento del grupo romano radical como un error
generoso por los siguientes motivos:
“Indubbiamente l'aspirazione e l'ideale ultimo del cristiano è l'assunzione di ogni rapporto sociale
in quella più alta socialità che, nella sua fede, unisce gli uomini redenti e li fa partecipi della vita
divina; ma è questo un ideale che trascende, nella visione cristiana, ogni realizzazione mondana” 34 .
Los diferentes planteamientos sociales de Buonaiuti y Murri representan, de
hecho, los matices antitéticos del modernismo religioso italiano que alteraron,
tanto el uno como el otro, el verdadero mensaje del movimiento: éste por
traicionar el auténtico mensaje cristiano al malinterpretar el concepto de
escatología como materialismo mundano que, de algún modo, se aproximaba a la
visión marxista; aquél por la razón contraria, o sea, por ser un tomista,
excesivamente moderado y temeroso, criticado por los modernistas y atacado por
la autoridad, como para ser exluido del movimiento por Paul Sabatier 35 y juzgado
por el mismo Buonaiuti “imbevuto di scolasticismo” en sus más íntimas
entrañas 36 .
Tal vez la corriente modernista mayormente apoyada en Italia era la de la
escuela perugina de Piastrelli y Fracassini que, no obstante una primera
participación de Piastrelli a las tertulias en casa de Buonaiuti, distinguía un
modernismo “bueno” 37 , abierto a las perspectivas tecnico-científicas, y uno
33 Véase Nova et Vetera, «Più sincerità», 10-25 de junio de 1908, p. 407; y «All'Azione
democratica», 10-25 de julio de 1908, p. 51.
34 P. Scoppola, cit., pp. 322-323.
35 Cfr. P. Sabatier, Les modernistes, cit., p. 66.
36 Cfr. E. Buonaiuti, Lettere di un prete modernista, cit., p. 107.
37 Cfr. R. Moro, «Il modernismo buono. La “modernizzazione” cattolica tra fascismo e
postfascismo come problema storiografico», en Storia Contemporanea, 1988, n. 4, pp. 625-716.
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