miguel de unamuno frente al modernismo religioso - Gredos ...

econoce la bancarrota de la ciencia y de la razón y que puede convertirse en
misticismo y fe religiosa, hasta ganarse la calificación de “scettico credente” 38
pronunciada nada menos que por Ernesto Buonaiuti. Para el vasco tenía mucha
razón el ex redactor jefe de la revista ítalo-suiza: la religión es más cercana a la
filosofía escéptica que al dogmatismo. Rensi contestará muy rápidamente,
agradeciéndole la lisonja y aconsejándole la lectura – él que fue considerado un
riguroso continuador de la filosofía leopardiana 39 – de una obra del poeta italiano
Giacomo Leopardi, máximo representante del escepticismo filosófico absoluto y
del pesimismo cósmico.
De ese modo se articula la relación del Rector de Salamanca con el Cœnobium.
Ahora bien, desde un enfoque menos bibliófilo y más conceptual, pueden
señalarse algunos importantes aspectos que afectan a este trabajo. Sin lugar a
dudas, lo más interesante de la relación de don Miguel con la revista ítalo-suiza es
su participación en el debate sobre el tema de «Gesù o Cristo?». Ya hemos visto
en la parte I a , en el párrafo titulado «El Cristo de la historia y el Cristo de la fe»,
como la reflexión unamuniana sobre la naturaleza y esencia de Cristo afecta, más
que nada, a su obra poética. También hemos visto que su Cristo era
diametralmente opuesto al católico, era una creación de su fe cardiaca, una figura
casi mítica que, en un primer momento, refleja su España dolorida y que, luego,
en la medida en que entremezcla elementos humanos y divinos, representa a un
hombre eterno e ideal, símbolo de la humanidad. Además, el relativismo de don
Miguel, que trasciende la realidad empírica y los esfuerzos epistemológicos, no
tiende a la búsqueda de una verdad histórica de la existencia de Jesús conforme al
método histórico-crítico propuesto por Loisy. El abate francés creía necesario
precisar exégetica e históricamente el pasaje de la narración de la experiencia
histórica de Jesús de Nazaret a la definición de las varias teologías. De ahí el
problema de la concepción teológica, que sostiene su divinidad, y la reconstrución
del proceso histórico que ha dado este resultado. Distingue, pues, la humanidad de
Jesús, colocada en una esfera histórica, crítica y científica, de la divinidad de
Cristo, en otra religiosa, teológica y fideísta 40 , provocando la inevitable reacción
38 E. Buonaiuti, Giuseppe Rensi lo scettico credente, Roma, Partenia, 1945.
39 Cfr. M. F. Sciacca, Giuseppe Rensi, Milano, Marzorati, 1967, p. 71.
40 En otro artículo del mismo año Loisy reitera la realidad histórica de Jesús en oposición a la tesis
del filósofo alemán Arthur Drews, expuesta en su Die Christusmythe de 1909, que, por el
contrario, la negaba. Véase A. F. Loisy, «Le mythe du Christ», en Revue d'histoire et de littérature
religieuses, año 1910, tomo XVI, pp. 401-435. Junto con «Jesus ou le Christ», este ensayo fue
recopilado en su A propos d'histoire des religions, Paris, Nourry, 1911.
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