miguel de unamuno frente al modernismo religioso - Gredos ...

habrían de realizar los pueblos latinos únicamente sobre la base de su propia
cultura a través de un ruptura neta con la confesión católica. Boine, por su parte,
aprueba la idea de reforma, pero dentro de la Iglesia católica, o sea, sin romper a
la manera protestante. En la medida en que Unamuno comprende el planteamiento
religioso de su correspondiente, se incrementa la distancia y el choque dialéctico.
Conocida ya la obra de Towianski, el 19 de marzo de 1907 prevé con cierta
antelación, aunque era algo que flotaba en el aire, el inminente fracaso del
modernismo religioso. La condena a los varios Tyrrell y Fogazzaro, en efecto, no
tardará mucho en concretarse y llegará a ser oficial con las dos condenas papales
de julio y septiembre del mismo año. A Towianski, afirma don Miguel en la
misma carta, “le engañó el amor a su patria espiritual, a la religión católica en que
se había criado” 78 , y lo mismo debió de pensar de Boine y de los demás
modernistas. El catolicismo es una religión para los simples, para los que aceptan
verdades absolutas preestablecidas por otros y, para devolver la dignidad al
cristianismo de los pueblos mediterráneos, sigue reiterando una vez más, hace
falta una reforma que rompa abiertamente con la Iglesia Apostólica Romana. No
estaba de acuerdo Boine con eso de romper abiertamente con la Iglesia y en la
siguiente carta de abril de 1907 sostiene que no hay un cristianismo perfecto fuera
del catolicismo. La ruptura sólo ha de realizarse con aquellos dogmas escolásticos
que han alterado el verdadero valor del catolicismo y no con la esencia de la
tradición espiritual de la misma confesión. Rechazar la escolástica no significa
necesariamente alejarse de la Iglesia, afirma Boine acorde con el enfoque general
del modernismo religioso italiano. Don Miguel sigue insistiendo, entonces, sobre
su anhelo de reforma, en cuanto después del Concilio Vaticano I, cuando se
reconoció la infalibilidad del Papa, murió toda posibilidad de diálogo con la
Iglesia católica. Por lo cual, no es posible que “nos entendamos pues usted escribe
en italiano y en español yo y sospecho que en España catolicismo quiere decir
muy otra cosa que en Italia” 79 , le dice polémico a su joven correspondiente
italiano. La idea de Unamuno de una reforma religiosa a través de la ruptura con
la Iglesia no satisfacía las exigencias espirituales de Boine, como no hubiera
satisfecho las de cualquier otro modernista italiano. El poeta de Frantumi, por
consiguiente, no puede sino contestarle lo que le habría contestado todo
78 «Carta a Boine», 19 de marzo de 1907, infra, p. 505.
79 «Carta a Boine», 12 de abril de 1907, infra, p. 509.
485