miguel de unamuno frente al modernismo religioso - Gredos ...

aparece en Il Rinnovamento «La religiosità secondo il Pragmatismo» que llevó al
codirector Aiace Alfieri a agregar una nota crítica como colofón de sus
argumentaciones. Según el método pragmatista, el fenómeno religioso se remite a
la realidad de la psicología humana: Dios no sería nada más que un instino que
presiona para realizarse y Jesucristo sólo es un hombre dotado de una
extraordinaria capacidad para expresar el contenido de la religiosidad humana 129 .
Es fácil comprender que la revista no aceptara una toma de posición tan extrema
y, de hecho, fueron incrementándose las polémicas entre las dos tendencias
incluso por una diferente opinión sobre el pragmatismo: los moderados siguieron
interpretando la renovación en clave espiritual y antidogmática, pero salvando la
existencia de una realidad trascendente; los radicales conjugan las conclusines del
pragmatismo con los concepto adquiridos por la nueva investigación histórica
sobre las Sagradas Escrituras. Más que el objeto del conocimiento, es el proceso
para llegar al conocimiento lo que se convierte en el fin de la diatriba, dejando al
objeto el efímero papel de noúmeno.
Algunos años más tarde, Buonaiuti aclarará su posición con respecto al
pragmatismo, especificando que tampoco él, el modernista italiano que más
intensamente sostuvo la posición filosófica y religiosa de origen anglo-americana,
podía considerarse un pragmatista puro. Todavía resuenan en la cultura
modernista aquellas palabras de Buonaiuti cuando, sustancialmente, niega una
total adscripción del movimiento utilitarista por no reconocer la subordinación de
la verdad a la acción, preferiendo en cambio la idea de una recíproca dependencia:
“Per ciò che riguarda il pragmatismo puro, la mia obiezione contro di lui è tratta dalle Basi della
fede di Balfour. In quanto che io posso conoscermi, credo di sentire le più vive simpatie per il
pragmatismo. Ma non sono un puro pragmatista. Non credo che la verità sia subordianta all'azione,
ma credo che l'una e l'altra siano fattori della vita eguali e coordinati tra loro... Io credo di dover
insorgere contro l'identificazione del modernismo con una filosofia effimera, qualunque essa
sia” 130 .
Una filosofía efímera, juzgaba Buonaiuti el pragmatismo, aunque reconociera
sus más vivas simpatías, una filosofía que contó con muchos opositores incluso
entre los modernistas, porque si por un lado se aceptaron generalmente las
129 Cfr. P. Baldini (seudónimo de Buonaiuti), «La religiosità secndo il Pragmatismo», cit.
130 E. Buonaiuti, Le modernisme catholique, Paris, Rieder, 1927, edición consultada Il Modernismo
cattolico, Modena, Guanda Editore, 1943, pp. 212-213.
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