TESIS DOCTORAL - Instituto de Migraciones

Francesco comenzó a llamarme por teléfono. Me preguntó si yo tenía a
alguien. Le dije que no.
La pasión
En esa época también conocí a Carlos, un dominicano. Era un hombre
joven y guapo. Vivía cerca de donde yo trabajaba. Empecé a tener
relaciones con él y era muy cariñoso conmigo. Siempre que llegaba me
decía: - Hola, mi Reina. No fue enamoramiento, sino pasión. Pero, fue un
sentimiento muy fuerte. Me sentí muy bien con él. Sólo que mi familia lo
descubrió. Empezaron a preocuparse conmigo y me prohibieron salir con
Carlos.
Decían que a los dominicanos les gusta tener muchas mujeres. Yo discutía
con mi hermana a causa de esto. Ella decía que los dominicanos o pegan a
las mujeres o bien trafican con drogas. Y yo se lo conté a Carlos. Me dijo
que era cierto que había muchos hombres así, pero que no era su caso.
También me dijo que visto así, de la misma forma que todos los hombres
dominicanos eran maltratadores o traficantes, entonces todas las mujeres
brasileras eran putas. Porque en Suiza, si generalizábamos, la sociedad nos
veía a todos de esta forma.
Me fui alejando de Carlos, y al mismo tiempo volví a salir con Pietro. Todo
volvió a ir bien, con mucho cariño. Mi patrona me aconsejaba. Me decía
que mi relación con Pietro me iba a causar muchos problemas, sobre todo
cuando su familia descubriese lo de mis hijos. Pero, yo estaba enamorada y
no hice demasiado caso de las advertencias. Continué saliendo con Pietro.
Él al mismo tiempo tenía miedo. Un día me dijo que podíamos seguir
saliendo, pero ya no más como novios. Eso para mí fue como una
puñalada. Me sentí muy mal. Y como estaba muy enamorada, acepté.
Una forma más de ganar dinero
Comencé a mantener mucho contacto con María, mi amiga brasilera.
Salíamos juntas por la noche. Ella conocía el barrio donde trabajaban las
prostitutas. Si tú ibas sola por allí, los hombres se te acercaban y te
preguntaban que cuánto cobras. María ya trabajaba de garota de programa.
Una noche que estábamos juntas tomando una copa, llegó un hombre y ella
me dijo que yo le gustaba y que si quería podía ir con él, que lo conocía y
que pagaba muy bien. Esto ocurrió a principios de febrero del 2004. Yo le
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