TESIS DOCTORAL - Instituto de Migraciones

vino a trabajar conmigo. Dormíamos en el club. Estuve allí desde finales de
agosto hasta finales de octubre de 2004.
Janaina se fue para “A Seara”. Me decía que me quería y nos veíamos
durante los días de folga. Un día le dije a Bianca: no me quedo más, me
marcho. Cogí mis cosas y me vine para Lugo. Y me fui a trabajar con
Janaina al club “A Seara”. Ella llevaba hombres a casa, y yo no podía hacer
lo mismo. Me empezó a presionar: o estaba con ella o con Bianca en el
piso.
Después, pasamos un mes bien, sin pelear entre nosotras. Una amiga,
Mikaela, me dijo que Bianca había mandado hacer brujería para que
Janaina y yo estuviésemos peleando. Ahí, Janaina se enrolló con un tipo. Y
no quería que yo hiciese lo mismo. Yo no podía salir con hombres ni con
amigas. Un día llegó a morderme en la pierna. Todo a causa de los celos.
Janaina comenzó a salir con ese tipo y no volvía a casa por la noche. Yo me
quedaba sola. Ahí todo se volvió diferente. Ya nada era igual.
Durante las Navidades aquel hombre quiso llevarnos a Asturias. Cuando
viajábamos él empezó a conducir a gran velocidad. Tan rápido que ya me
estaba mareando. Le dije que si seguía corriendo así me bajaba del coche.
Y Janaina sólo se reía a carcajadas. Luego paró el coche y tuvimos una
escena allí en la carretera. Nos peleamos allí mismo. A Janaina le tiré del
cabello y le di un puñetazo a aquel tipo. Llegamos a Oviedo, y de allí,
después de otra discusión regresamos para Lugo. Casi tuvimos un accidente
a causa de las discusiones dentro del coche. Cuando llegué a casa, me
cambié, me arreglé y me fui para la discoteca sola. Regresé al día siguiente
a las nueve de la mañana.
Al día siguiente, Janaina empezó a hacerme preguntas, que con quién había
estado… En su cabeza ella sólo pensaba que había pasado la noche con otra
mujer. A ella siempre le gustó que yo asumiese el papel de hombre, y me
pedía que me vistiese como un hombre. Y yo eso de ningún modo. Me
pueden gustar las mujeres, pero no me identifico con un hombre de forma
alguna. Cuando salgo con una mujer siento falta de un hombre, y cuando
salgo con un hombre siento falta de una mujer.
Al poco tiempo, aparecieron dos chicos en el club. Janaina se fue con uno y
yo con el otro. Janaina pensaba que yo lo hacía por celos, y para mí era
sólo cuestión de dinero. Ella seguía pensando que yo iba a continuar
estando pendiente de ella. Y ya no era así. Aquellos chicos se dieron cuenta
enseguida de que Janaina y yo estábamos enrolladas. Entonces, intentaron
hacer una intriga entre nosotras. Y eso hizo que yo me separase del chico.
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