TESIS DOCTORAL - Instituto de Migraciones

Viajar a España
Estaba en un club una noche y un amigo me presentó a una travesti que
acababa de llegar de España. Me dijeron que yo podía ir, pero que tenía que
pagar doce mil euros.
Me sentía feliz y a la vez también insegura. En ese momento pasaba por
una buena etapa en Brasil, y me acordaba de todo lo que me había ocurrido
en Suiza la última vez. Viajé por París. Allí esperé durante siete horas por
un tren a Madrid. De Madrid cogí un autobús para Zaragoza. Todo estaba
preparado desde Brasil. De esos doce mil euros que tenía que pagar, diez
mil eran para la travesti, y dos mil para el dueño del piso de Zaragoza.
Antes de viajar me dieron mil euros y un mapa explicando mi ruta con los
sitios por donde tenía que ir hasta llegar a Zaragoza. Cuando llegué al piso
de Zaragoza me encontré con dos amigas de Brasil. Charlamos. Descansé
para comenzar a trabajar al día siguiente. La travesti que me trajo desde
Brasil me había dicho que no debía llevar ropa de trabajo ni nada, que en
Zaragoza ya me proporcionarían todo lo que necesitase.
Después de una semana en Zaragoza me di cuenta de que había sido
engañada. Yo tenía que haber viajado a Suiza. La travesti cambió mi
trayecto al contactar con el dueño del piso en Zaragoza. Entonces, la
travesti de Suiza llamó al piso. Pelearon muy feo. Al final, acordaron que
yo tenía que pagar dos mil euros al dueño del piso, y que haría las plazas
que estaban marcadas durante un período de seis meses, y que sólo
entonces me dejarían marcharme para Suiza. Pero, las cosas no fueron tan
sencillas.
Fue cuando una cafetina de la calle allá en Brasil donde yo trabajaba
descubrió que estaba en España. Esa cafetina me multó en mil euros. Allí en
Brasil comanda la prostitución de travestis en el barrio donde yo estaba
trabajando. Ella fue la misma persona que me trajo para Suiza en el año
1996. Las cafetinas son mafia. Yo nunca había tenido problemas con ella,
pero no aceptaba así como así que yo viniese para España sin contar con
ella. Hoy ella es una transexual, porque ya se ha cambiado de sexo.
Los pisos de contactos
Durante un par de semanas trabajando en el piso de Zaragoza conseguí el
dinero para pagarle a la cafetina de Brasil. Le dije claramente que no iba a
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