Procedimiento para la operación del servicio de pedagogía ... - IMSS

Después de la lactancia las conductas dependientes sufren cambios enormes; el apego y la dependencia
parecen ser los fundamentos del desarrollo social, éste se manifiesta con mayor claridad hacia los tres años de
edad, donde los menores pasan cada vez menos tiempo con los padres y más con otras personas, en especial
con niños. Pasa del apego de la madre y adultos significativos al egocentrismo y, poco a poco, a la socialización.
Suelen haber establecido relaciones sociales con hermanos y niños de igual edad. Al transcurrir el tiempo, las
relaciones entre iguales se modifican no sólo en cantidad sino en calidad.
Es importante que el adulto que esté en contacto continuo con el menor manifieste confianza en sí mismo,
autoridad y congruencia, pero principalmente debe ser cordial, razonable y comprensible de los sentimientos y
puntos de vista del menor. Es una combinación de pedagogía, respeto, afecto y disciplina, con el propósito de
que el menor empiece a trabajar su independencia proveniente de la seguridad y libertad que los padres y
demás adultos otorguen en él. La participación social conlleva plática, sonrisas y aprobación, las cuales parecen
incrementar la eficacia del establecimiento de relaciones sociales. La imitación ya no sólo se da de niño a
adulto sino entre niños que interactúan a un nivel conductual muy parecido, por lo tanto una técnica para
aprehender o modificar conductas es la imitación de niños mayores o de la misma edad que tienen
comportamientos apropiados.
Con respecto al desarrollo del lenguaje se enuncia que el menor ya emite respuestas más estructuradas y
lógicas, empieza a tratar de unir palabras con un orden significativo gracias a la imitación, constancia y trabajo
de las personas que interactúan con él. Por lo tanto, las palabras que evoquemos, serán de suma trascendencia
para fortalecer la facultad de lenguaje en el niño, está en nuestras manos la riqueza de su vocabulario.
El juego es el instrumento medular para que el niño aprenda y se desarrolle en todas sus esferas (cognitiva,
biológica, psicológica y social), es su manera de aprender lo referente al mundo. Por lo tanto, es nuestra tarea
cuidar que el niño se desarrolle y juegue en un ambiente sano, con gran variedad de materiales para estimular
y aprender, a fin de satisfacer los distintos niveles de habilidad, potencialidad, creatividad e intereses de cada
niño. Es importante mantener una rutina planeada y estructurada que vincule la edad cronológica y madurez
del niño, donde las actividades educativas no estén desgastadas, donde exista innovación y trabajo en equipo.
Cada acción realizada por todo el personal de la guardería debe estar enfocada al beneficio del niño, donde el
perciba cariño y seguridad.
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DPES/CG/003/028