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Tratado De Derecho Penal - Parte General - Tomo III

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ttrtela el derecho, sin que sea necesario que lo tutele el derecha<br />

penal 82.<br />

La amplitud de los objetos surge en nuestro ordenamiento con<br />

toda claridad de la amplitud de los vocablos empleados en la ley:<br />

"defensa propia", "de sus derechos", "de la persona o de los dere--<br />

chos de otro" (art. 34, jncs. 60 y 70).<br />

El problema no radica en limitar bienes jurídicos, sino en determinar<br />

en cada caso, conforme a la jerarquía del bien y a la intensidad<br />

de la lesión amenazada, si es jurídicamente tolerable el empleo<br />

del medio necesario 33. Incluso será defendible !a tranquilidad noctilrna<br />

contra el borracho perturbador, siempre que se use un medio<br />

racionalmente necesario, como puede ser un balde de agua 34.<br />

En cuanto a la posibilidad de lesionar la vida para defender la propiedad,<br />

en Europa se discute si es posible a la luz del art. 2 IIa de la<br />

Convención Europea de <strong>De</strong>rechos Humanos, que dispone que la muerte<br />

intencional de una persona sólo se admita para evitar la violencia contra<br />

ctra. Las opiniones se encuentran divididas. Si bien la mayoría de los<br />

autores sostiene que la Convención no es impedimento para aceptar la<br />

legítima defensa de la propiedad a costa de la vida, debido a que ésta<br />

rige sólo las relaciones del Estado con sus ciudadanos y no de éstos entre<br />

síx",ay otras que sustentan que también a éstas debe aplicarse la Convención<br />

3'3.<br />

426. La agresión ilegítima. La agresión ilegítima debe ser<br />

siempre una conducta humana agresivá y antijurídica. Este enunciado<br />

implica tres órdenes de requisitos: que trate de una conducta,<br />

que sea agresiva y que sea antijurídica.<br />

en sentido contrario, IIERRERA, JULIO, La reforma penal, 465-7; sobre la posibilidad<br />

dr defender el derecho de preferencia en el estacionamiento de autumóviles,<br />

BOCKELMANN, PAUL, nota en NJW, 1966, 745-7; BUSSE, VOLKER, Notigung<br />

im Straszcnoerkehr, 1968, 123; Xfuh.oz R.-GUE~A DE VILLALAZ, 251; BRITO<br />

ALVES,552; COus~ho ~IACIVER, 11, 224.<br />

3 " ~ ~ ~ ~ ~ ~ 135; W EWEUEL, R ~ ~ 84. ,<br />

Cfr. FOYTÁN BALESTRA, 11, 132; WELZEL, 87; OETKER, op. cit., p. 360.<br />

34 STRATENWERTH, 139.<br />

35 WELZEL, 86; JESCHECK, 259; del mismo, Die Europüische Konoention<br />

zutn Sciitctze der Alenschenrechte und Grundfreiheiten, en NJW, 1954-784;<br />

SCHWARZ-DREHER, 1970, 310; LENCKNER, THEODOR, "Gebotensein" und "Erforderlichkeit"<br />

der Notwchr, en GA, 1968, 5; BOCKELMANN, PAUL, Menschenreclitskonoention<br />

und Nottcehrrecht, en "Fest. für Engisoh", 1969, 465; MAURACH,<br />

314; MEZGER-BLEI, 1970, 133.<br />

36 STRATENWERTFI, 140; SCIIONKE-SCIIRODER, 1972, 467; RAUMANN, 310;<br />

WOESNER, ~IUHYT,<br />

Uie MenscJienreclitukonoer.tion in der decitsche Strafrechts-

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