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James Joyce

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pusieran medias suelas nada más ya que los tacones estaban todavía en buen estado.<br />

Aseguró que esto le había perturbado grandemente su paz de conciencia en la otra<br />

región y que sinceramente requería que su deseo se diera a conocer. Fueron dadas<br />

garantías de que al asunto se le prestaría la atención debida y se dio a entender que<br />

esto había sido acogido con satisfacción.<br />

Se fue de la vivienda de los mortales: O'Dignam, sol de nuestra mañana. Efimera<br />

era su pisada en el helechal: Patrick el de la frente esplendente. Gime, Bamba, en el<br />

viento: y gime, Oh océano, en tu vorágine.<br />

Ahí anda otra vez ése, dice el paisano, mirando hacia fuera.<br />

-¿Quién? le digo yo.<br />

-Bloom, dice él. Ahí anda de guardia de arriba a abajo hace diez minutos.<br />

Y, la hostia, vi que asomaba el hocico y que se largaba otra vez.<br />

El pequeño Alf se había quedado de una pieza. Te lo juro que sí.<br />

-¡Dios santo! dice. Hubiera jurado que era él.<br />

Y dice Bob Doran, con el sombrero atrás en la molondra, el mayor marrajo de<br />

Dublín cuando está mamao:<br />

-¿Quién dijo que Dios sea santo?<br />

-Suplico que me disgolpe, dice Alf.<br />

-¿Es santo ese Dios, dice Bob Doran, que se nos lleva al pobrecillo de Willy<br />

Dignam?<br />

-Ya, sí, dice Alf, dejándolas correr. Ha dejado de padecer.<br />

Pero Bob Doran le grita como un energúmeno.<br />

-Es un jodido sinvergüenza, lo digo yo, por llevársenos al pobrecillo de Willy<br />

Dignam.<br />

Terry se aproximó y le hizo un guiño para que cerrara el pico, que ellos no<br />

permitían esa clase de lenguaje en un local respetable y con todas las autorizaciones.<br />

Y Bob Doran empieza a echarle flores a Paddy Dignam, tan cierto como que estás<br />

aquí.<br />

-La mejor persona, dice él, moqueando, el hombre más honrado.<br />

Lágrimas de cocodrilo en los ojos. Largando disparates. Mejor que se fuera a casa<br />

con la putilla sonámbula con que se ha casado, Mooney, la hija del porquerón, la

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