La empleabilidad de los jóvenes en Castilla y León - Consejo ...

1.4.- Responsabilidad administrativa por infracción de las normas sobre trabajo de
menores
El art. 8.4 LISOS tipifica como infracción muy grave la transgresión de las normas sobre
trabajo de menores. Tal será la calificación correspondiente, excepto cuando se trate de la
inobservancia de las disposiciones específicas sobre protección de su seguridad y salud, pues
entonces se aplicará, como norma especial, el art. 13.2 LISOS, donde tal comportamiento se
lista entre las infracciones muy graves en materia preventiva (Capítulo II, sección 2ª),
merecedor, por tanto, de sanciones más elevadas a las previstas para las contempladas en el
Capítulo II, sección 1ª (infracciones en materia de relaciones laborales). Por cuanto hace a la
vulneración de las normas relativas al tiempo de trabajo, pese a su tipificación general como
falta grave en el art. 7.5 LISOS, su sanción debe tener lugar a partir del citado art. 8.4
LISOS cuando los afectados sean menores; es decir, como muy grave 319 .
2.- Período de prueba
La posibilidad de que titular de la unidad productiva y trabajador sometan la plena
eficacia del contrato de trabajo a un período de prueba a fin de comprobar si las aptitudes y
cualificaciones del empleado se corresponden con las exigencias del puesto de trabajo a
desarrollar o si las condiciones laborales colman las expectativas del asalariado 320 , encuentra
cobijo legal en el art. 14 ET.
Dicho precepto no ofrece una “definición legal de la prueba en el contrato de trabajo, que
podría concretarse en el período limitado de tiempo en el que las partes se someten a mutua
experimentación a través de las correspondientes prestaciones sinalagmáticas” 321 .
En cualquier caso, su razón última pasa por “verificar si se cumplen las expectativas
depositadas por uno y otro en el vínculo contractual, a efectos de decidir si otorgan
estabilidad y carácter definitivo a la relación laboral concertada, o si, por el contrario, alguno
de ellos opta por resolver libremente el contrato” 322 ; en otras palabras, “la finalidad del
instituto del período de prueba es la experimentación ‘sobre el terreno’ de la relación de
trabajo mediante la ejecución de las prestaciones respectivas de las partes, siendo sus
funciones manifiestas la comprobación de la aptitud profesional y la adaptación al puesto de
trabajo del trabajador contratado, teniendo mayor significación estas funciones en los
trabajos cualificados y de dirección o supervisión, que en otros menos cualificados y tiene,
consustancialmente, un carácter de temporalidad y provisionalidad, y de ahí, que sea
razonable, que su duración sea por lo general, breve” 323 .
De conformidad con el precepto señalado, semejante estipulación habrá de ser recogida por
escrito, conformándose como un requisito ad solemnitatem pues, “al configurarse como un
pacto típico en el inicio del contrato, dependiente de la voluntad de empresa y trabajador, a
quienes puede interesar o no pactarlo, por lo que para que se entienda existente no basta
con que así se prevea de manera genérica en el Convenio Colectivo aplicable a la relación
laboral que se concierta” 324 , es necesario respetar la exigencia de forma manuscrita, aun
cuando ex art. 8.1 ET el propio contrato de trabajo no haya de cumplir expresamente con tal
ceremonia.
319 SSTSJ Murcia 6 abril 2001 (JUR 171797) y Castilla y León/Valladolid 6 febrero 2004 (JUR 231056).
320 En efecto, “no está de más recordar que el fundamento del período de prueba al que se refiere el artículo 14 del ET,
se encuentra en que este se ofrece tanto en beneficio del trabajador, como en beneficio del empresario, y en que su
finalidad no sólo es la primordial de constatar la aptitud técnica de aquél para la labor concreta encomendada, sino la
de conocer otros datos relevantes y condiciones personales de los que conviene que estén informados, de un lado el
empleador para una mejor satisfacción de sus intereses empresariales tales como disciplina, instrucción, diligencia,
rendimiento, etc., y de otra el operario, al que le interesa comprobar en la práctica, el ambiente en que su tarea se va
a desarrollar y desempeñar, el estado de organización de ésta, etc. En definitiva el fundamento del periodo de prueba
es el conocimiento mutuo y lo más completo posible de los contratantes, para eliminar riesgos futuros, en orden al
desarrollo de unas relaciones laborales continuadas, correctas y eficientes”, STSJ La Rioja 21 marzo 2011 (JUR
132444).
321 STS 18 abril 2011 (JUR 245257).
322 GARCÍA RUBIO, Mª.A.: “El período de prueba”, en AA.VV. (GOERLICH PESET, J,Mª., Coord.): Contratación laboral y
tipos de contrato: criterios jurisprudenciales, Valladolid (Lex Nova), 2010, pág. 80.
323 STS 20 julio 2011 (JUR 322391).
324 SSTS 19 junio 1990 (RJ 5486) y 5 octubre 2001 (RJ 9590).
413 INFORME SOBRE LA EMPLEABILIDAD DE LOS JÓVENES EN CASTILLA Y LEÓN