La empleabilidad de los jóvenes en Castilla y León - Consejo ...

Española de Empleo 2012-2014 (aprobada el 31 de octubre de 2011 122 , al objeto de
garantizar la igualdad de acceso, la cohesión social y la complementariedad entre la unidad
de mercado y la diversidad territorial), acompañada del “Plan Anual de Política de Empleo”,
que marque los objetivos a conseguir y en la cual cada Comunidad Autónoma tendrá libertad
para fijar sus propios programas de política activa de empleo, de forma que se ajusten mejor
a la realidad de las personas desempleadas y del tejido productivo de la misma. En este
sentido, se evoluciona desde el concepto de programas al de “servicios a la ciudadanía y las
empresas”, superando la actual limitación de la gestión de las políticas activas a
convocatorias de ayudas. Una importante novedad que contiene esta norma es la
constitución, en el seno del Servicio Público de Empleo Estatal, de un “Fondo de políticas de
empleo”, cuya finalidad es la de atender las necesidades futuras de financiación en la
ejecución de las acciones y medidas que integran dichas políticas activas.
En relación con el objeto de estudio, la reciente Estrategia Española de Empleo 2012-2014
destaca entre sus objetivos estratégicos, el de promover un enfoque integral de las acciones
y medidas de contratación “temporal” para la realización de obras y servicios de interés
general, vinculándolas a otras actuaciones y servicios de mejora de la empleabilidad,
especialmente en el caso de personas paradas de larga duración, personas jóvenes y
personas en situación de exclusión social (OE16). Del mismo modo, dentro de los objetivos
operativos o de participación, figura el de lograr incrementar la contratación de personas
jóvenes desempleadas con baja cualificación al menos un 10% de media anual en el trienio
2012-2014 (OO3-2); alcanzar una participación del 14% de las personas menores de 25
años en formación y práctica profesional no laboral en las empresas 123 (OO4-2); alcanzar un
tasa de inserción laboral de las personas menores de 30 años del orden del 40% o establecer
acuerdos con organizaciones empresariales, de autónomos, cámaras de comercio, etc., para
fomentar acciones de apoyo profesional a futuros emprendedores, especialmente jóvenes,
facilitando medios necesarios para realizar prácticas (OO7-2) o reforzar el aprendizaje de
idiomas en las acciones de formación profesional para empleo de las personas trabajadoras,
desempleadas y ocupadas (OO9-4).
6.- Las últimas manifestaciones de la política de empleo, a partir de la
aprobación del Real Decreto-Ley 1/2011, de 11 de febrero
Como con acierto se ha dicho, más allá de los subsidios pasivos, las políticas activas de empleo
empujan al individuo sin trabajo a realizar actividades socialmente útiles y como tales
valorizables como ejemplo de ciudadanía, que le permitan salir de la marginalidad social a la
que de otra forma estaría condenado ante la falta de trabajo existente 124 .
Las políticas de fomento de empleo, en sentido amplio, se suelen identificar con todo el catálogo
de programas y medidas orientados, directa o indirectamente, a incrementar o mejorar el
volumen y calidad de ocupaciones que el sistema socioeconómico está dispuesto a proveer o
mantener en unas coordenadas de tiempo y lugar, incluyendo tanto las medidas que inciden en
el empleo por cuenta ajena (empleo privado, público y de interés social) como el empleo por
cuenta propia (autoempleo individual y autoempleo colectivo o de economía social).
En sentido más restrictivo, el fomento del empleo abarcaría el conjunto de medidas o técnicas
orientadas a fomentar la contratación de trabajadores desempleados y más particularmente los
de aquellos colectivos que encuentran mayores dificultades de integración en el mercado de
trabajo. Por el carácter o contenido material del estímulo o incentivo, se distinguen las medidas
de carácter económico-financiero o de incentivación monetaria que implican ayudas económicas
al empleo y pueden consistir en cantidades a tanto alzado a percibir por los beneficiarios, o en
122
Por Real Decreto 1542/2011, de 31 de octubre (BOE 19 de noviembre de 2011).
123
Consciente de la especial dificultad de inserción en el mercado laboral de aquellas personas jóvenes que, aun
teniendo una formación académica o profesional acreditada, carecen de experiencia laboral, el ejecutivo acaba de
regular las “prácticas no laborales en empresas”, por Real Decreto 1543/2011, de 31 de octubre (BOE 18 noviembre
2011).
124
LANDA ZAPIRAÍN, J.P.: “Constitución y futuro del modelo español del Derecho del Trabajo del próximo siglo”, Lan
Harremanak, núm. 1, 2000, pág. 160.
511 INFORME SOBRE LA EMPLEABILIDAD DE LOS JÓVENES EN CASTILLA Y LEÓN