La empleabilidad de los jóvenes en Castilla y León - Consejo ...

) Ha de adoptar la forma jurídica de sociedad mercantil o cooperativa y estar
constituida legalmente e inscrita en el registro correspondiente.
c) El proyecto empresarial deberá ser viable desde el punto de vista económico,
técnico y financiero, en orden al cumplimiento de sus fines. La referida viabilidad se reflejará
en la correspondiente memoria.
d) Tienen que estar promovidas y participadas, salvo que adopte la forma de
sociedad cooperativa 408 , por una o varias entidades sin ánimo de lucro que, entre sus
objetivos, persigan la integración social y laboral de personas en situación o riesgo de
exclusión y el conjunto de la participación de las entidades sin ánimo de lucro deberá superar
el cincuenta por ciento del capital social total de la empresa.
De comparar los requisitos entre la normativa estatal y la autonómica, cabe observar varias
coincidencias, pero la Ley 44/2007 establece parámetros más elevados en cuanto al número
de empleados en inserción, determina el porcentaje reinvertido en la organización e impone
la presentación de un balance social.
La disparidad de condiciones trae su origen en la anterior promulgación (ya apuntada) de la
autonómica, mas al entrar en vigor la estatal, los requisitos en ella contenidos prevalecen.
En consecuencia, para la atribución del calificativo “de inserción”, la unidad productiva ha de
acreditar el cumplimiento de éstos y, por supuesto, será considerada como tal e incluida en
el Registro por Castilla y León.
El problema nace en el cómputo de contratos en inserción, mientras el art. 5 Ley 44/2007
guarda silencio y admite cualquier modalidad --con matices--, la norma regional deja fuera a
los trabajadores a tiempo parcial con una jornada inferior al 50% de la legal o convencional
pactada. El art. 13 de aquélla soluciona la aparente contradicción entre ambas normas y
unifica el cómputo al imponer un tope mínimo de la jornada a tiempo parcial coincidente con
el autonómico.
En cuanto a la actividad desarrollada por estas organizaciones, determinados sectores de
actividad han sido considerados tradicionalmente más apropiados para acoger a este tipo de
empresas --por ejemplo, la Comisión Europea señala los servicios de la vida diaria (a
domicilio, cuidado de menores, ayuda), servicios de mejora de la calidad de vida
(reparaciones, seguridad, transporte, revalorización de espacios públicos, servicios de
proximidad, catering, cuidado de enfermos), servicios culturales y ocio y servicios
medioambientales-- 409 .
En España, destaca como primera actividad la de “reciclaje, recogida y recuperación”. Se
trata de una actividad que permite a estas empresas tener un doble impacto social: la
inserción laboral y un impacto medioambiental al permitir la reutilización de algunos
residuos. En esta actividad se incluyen el reciclaje de ropa, de residuos de aparatos
eléctricos y electrónicos y de muebles, entre otros. Entre todas, el reciclaje de ropa
(13,76%) es el preferido por estas empresas, seguido por el de muebles (7,94%).
La segunda actividad productiva la llevan a cabo en el sector de la “construcción”, que
muchas veces también ha estado vinculado al otorgamiento de concursos públicos.
Seguidamente aparece el sector de “servicios a las personas” como tercera actividad
mayoritaria. Ésta, además, ha sido catalogada como uno de los nuevos filones de empleo, lo
que supone uno de los servicios en expansión y que estas empresas han sabido aprovechar
para ampliar sus oportunidades en el mercado. Los “servicios a las personas” reúnen
fundamentalmente servicios de proximidad y limpieza.
408 En el supuesto de tener forma jurídica de cooperativa deberá estar calificada previamente como de iniciativa social,
de acuerdo con el artículo 124 de la Ley 4/2002, de 11 de abril, de Cooperativas de la Comunidad de Castilla y León.
409 LUJÁN ALCARAZ, J.: “Empresas de inserción”, AS, núm. 20, 2007.
617 INFORME SOBRE LA EMPLEABILIDAD DE LOS JÓVENES EN CASTILLA Y LEÓN