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mexicanos.” 169 Así es como “[e]n aras de la modernidad, progreso y civilización, a los
indígenas y mestizos se les negó el derecho de ser partícipes de la historia y forjadores de su
futuro.” Sin embargo, expresa Stavenhagen que la negación del presente indígena era irreal
pues lo indígena permaneció en la vida cotidiana de estos hombres y mujeres. 170 Para Clavero
“las comunidades y las costumbres indígenas, unos órdenes políticos y unos ordenamientos
jurídicos, siguen teniendo una existencia de hecho al margen y en los márgenes del sistema
constitucional, condicionándose e interfiriéndose mutuamente”. 171
En esta época también puede hablarse de una manipulación ideológica de la prensa
sobre los movimientos agrarios e indígenas que los convirtió en una “amenaza virtual contra ‘la
propiedad y la civilización’”. La propiedad y la civilización se identificaban como cualidades
de la “gente de razón” o “gente decente”. Así, los ataques racistas contra los indígenas y
campesinos aumentaron. 172
Por su parte, la constitución liberal de 1857 por un lado declaraba ciudadanos iguales a
todos los habitantes de la república, y por otro privaba a los grupos étnicos del derecho
consuetudinario que amparaba sus formas de vida comunitaria y los despojaba de personalidad
jurídica para defender sus tierras sin proveer ninguna legislación social en su favor. 173
A pesar de que en el siglo XIX hubo alguna ley que protegió comunidades indígenas, la
avasalladora tendencia fue en el sentido de ignorar las identidades indígenas. 174 En su período
de gobierno el presidente Comonfort formó un gabinete integrado por seis personas, entre
quienes se encontraban Benito Juárez, Melchor Ocampo, Miguel Lerdo de Tejada y el propio
Comonfort. Este gabinete tuvo una actividad legislativa importante. Entre las leyes que
desarrolló se encuentra la llamada Ley Lerdo, de 25 de junio de 1856, que dispuso “la
desamortización de fincas rústicas y urbanas pertenecientes a las corporaciones civiles o
eclesiásticas, disponiendo se adjudicasen al arrendatario o al mejor postor.” 175
169 DURAND ALCÁNTARA, Carlos H., Derecho nacional, derechos indios y derecho consuetudinario
indígena. Los triquis de Oaxaca, un estudio de caso, op. cit., p. 36
170 STAVENHAGEN, Rodolfo, (coord.), Derecho indígena y Derechos Humanos en América Latina, op.
cit., p. 39
171 CLAVERO, Bartolomé, Derecho indígena y cultura constitucional en América, op. cit., p. 42
172 FLORESCANO, Enrique, Etnia, Estado y Nación. Ensayo sobre las identidades colectivas en México,
op. cit., p. 327
173 FLORESCANO, Enrique, Etnia, Estado y Nación. Ensayo sobre las identidades colectivas en México,
op. cit., p. 431
174 STAVENHAGEN, Rodolfo, (coord.), Derecho indígena y Derechos Humanos en América Latina, op.
cit., p. 302
175 SOBERANES, José Luis, Historia del derecho mexicano, op. cit., p. 151