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Por otro lado, la población no indígena de México ha tenido escasas
oportunidades de conocer los aportes culturales de los diversos grupos indígenas con
los que comparte territorio. Eso explica que las actitudes de ignorancia,
desconocimiento, e incluso de discriminación y racismo, persistan entre la población
mayoritaria respecto de los pueblos indígenas.
En el Programa Nacional de Educación 2001-2006 se definió la necesidad de
consolidar una educación intercultural que promueva el respeto a la diversidad cultural
y lingüística y que atienda con calidad, equidad y oportunidad las demandas
educativas de los pueblos y comunidades indígenas. De la misma manera, se
estableció la meta de comenzar a desmantelar las actitudes de discriminación y
racismo para lograr una valoración de la diversidad en la que vivimos los
mexicanos.” 190
Como vemos, se han ido adoptando palabras del movimiento multiculturalista y de los
reclamos indígenas. El discurso parece ir en el sentido del respeto a la diversidad cultural. Sin
embargo, nuevamente la única referencia importante que se hace es al problema de la
desigualdad y la discriminación, muy grave por cierto, pero como se ha señalado, esto no
reconoce al otro como sujeto diferenciado sino como sujeto en condiciones de desventaja. Por
otro lado, se habla de “la necesidad de consolidar una educación intercultural que promueva el
respeto a la diversidad cultural.” Lo anterior nos parece un poco engañoso pues el discurso, que
aparece como reconocedor de la diversidad cultural, esconde primero, que sólo habrá un
promotor de este tipo de educación y este es el gobierno de manera unilateral; segundo, qué él
mismo sabe las formas de hacerlo; tercero, no se sabe en qué sentido se está utilizando el
término cultura y todo parece indicar que es en el sentido de folclor y gastronomía. Se
reconoce una diversidad proveniente de los pueblos indígenas, pero eso no tiene relevancia
jurídico-política de alto nivel, sino que se tiene como un elemento a tomar en cuenta de manera
discrecional por quien está a cargo de las políticas públicas.
Otra disposición que omite hablar de pueblos indígenas es el artículo 27 constitucional,
que establece que “la ley protegerá la integridad de los grupos indígenas”. Al hablar de grupos
indígenas, se niega de nuevo a hablar de pueblos, término que ya utilizaba el artículo 4º y que
hoy utiliza el artículo 2º, así como el Convenio 169 de la OIT, ratificado por México en 1989. 191
190 Avances y retos del gobierno federal en materia de derechos humanos, cit., p. 42
191 ESPINOZA SAUCEDA, Guadalupe, et. al., Los pueblos indígenas ante la Suprema Corte de Justicia
de la Nación, México, Centro de Orientación y Asesoría a Pueblos Indígenas, Convergencia Socialista,