Projecte Educatiu de Centre - IES Tavernes Blanques - Generalitat ...

7. Tecnología y sociedad. Pone de manifiesto los aspectos sociales del fenómeno científico y
tecnológico, tanto en lo que respecta a sus condicionantes sociales como en lo que atañe a sus
consecuencias sociales y ambientales. Se incluyen en este bloque contenidos sobre el mundo
empresarial, profesional y laboral, y la tecnología del propio entorno, muy importantes y útiles para la
orientación profesional del alumnado. También se tratan contenidos de seguridad e higiene en el
trabajo y de prevención de riesgos laborales.
Recordar aquí que, en los bloques que abordan las TIC, es imprescindible su empleo no como fin en sí
mismas, sino como herramientas del proceso de aprendizaje. Sin embargo, no debe olvidarse que las
tecnologías de la información y la comunicación han de crear espacios para la socialización, la
comunicación con otras personas, la creatividad, la imaginación y la participación ciudadana
(ciudadanía digital).
El profesorado, en su programación de aula, deberá fomentar la integración de los distintos
contenidos estudiados, en las unidades didácticas que establezca, en función de los condicionantes
didácticos particulares, de la propia materia y del entorno físico-tecnológico. Los condicionantes
didácticos particulares pueden ser: la material o dotación disponible en el centro y los intereses,
particularidades y ritmos de aprendizaje del alumnado, entre otros. La propia materia, en el caso de la
tecnología, recomienda, por citar tres ejemplos, explicar y trabajar la electricidad antes que la
electrónica, el control cableado antes que el programado o la representación a mano alzada antes que
el diseño asistido por ordenador. El entorno físico-tecnológico hace referencia a las actividades
tecnológicas predominantes en la zona: agricultura, cerámica, mueble, industria fallera, calzado, textil,
hotelería, etc. (de gran importancia para la orientación profesional).
En todo caso, el aprendizaje de los contenidos debe procurar:
– Trabajar en contexto, siempre que sea posible; de esta forma, el aprendizaje es más sólido y
duradero, ya que crea relaciones y conexiones.
– La realización de tareas enmarcadas en diferentes contextos de aprendizaje, vinculados con la
realidad y con situaciones auténticas de aprendizaje. Para el desarrollo de las competencias básicas
resulta imprescindible aprender en contextos lo más reales posible.
– El refuerzo de la capacidad de relación interpersonal.
– La resolución de problemas.
– El fomento de la autonomía personal (aprender a emprender).
– La integración de las TIC en todas las situaciones en las que sea posible y conveniente.
La posibilidad de realizar prácticas, demostraciones y reproducir o emular procesos de resolución de
problemas a través de una metodología de proyectos (diseño y planificación y posterior trabajo
práctico en el aula-taller) se convierte en la culminación del proceso de aprendizaje de todas las
materias del programa. Esto requiere que el alumnado trabaje en equipo de modo colaborador, que
aplique e integre –de forma totalmente práctica y adaptada al entorno– conocimientos de todas las
materias y permite que desarrolle las cualidades necesarias para un futuro trabajo profesional dentro
de un grupo. Puede resultar muy interesante el planteamiento de varios proyectos que integren los
conocimientos del resto de ámbitos y materias del programa: el científico, el socio-lingüístico, la
tecnología, etc. Es una forma excelente de ayudar al alumnado a adquirir y desarrollar las
competencias básicas.