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Bajar documento - La nueva concepción de la historia

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Stalin era uno <strong>de</strong> ellos. En cuarto lugar, Stalin era, en el marco <strong>de</strong> una perspectiva<br />

particu<strong>la</strong>r y asumida conscientemente, un ser humano <strong>de</strong> teoría. Su célebre ensayo<br />

sobre <strong>la</strong>s nacionalida<strong>de</strong>s no ha sido en lo esencial superado, sus consi<strong>de</strong>raciones <strong>de</strong><br />

materialismo histórico son siempre ilustrativas y, aunque limitadas, sus especu<strong>la</strong>ciones<br />

sobre <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones entre el lenguaje y el pensamiento son magníficas. Evi<strong>de</strong>ntemente<br />

no era, en el sentido más purista y estrecho <strong>de</strong> <strong>la</strong> expresión, un «académico» (pero<br />

¿qué académico podría organizar un p<strong>la</strong>n quinquenal, dirigir el contra-ataque en<br />

Stalingrado o conducir <strong>la</strong>s negociaciones con Churchill en Teherán?). Yo <strong>de</strong> todos<br />

modos estoy convencido <strong>de</strong> que era una persona que, a los 60 años, hubiera podido<br />

impartir en <strong>la</strong>s mejores universida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l mundo y mejor que nadie una cátedra que<br />

hubiera podido l<strong>la</strong>marse `Sobre <strong>la</strong> vida'. Empero, si bien podía enseñar, y mucho, no<br />

era esa su función. <strong>La</strong> <strong>de</strong> él era mandar y construir y eso es algo que, como<br />

argumentaré en breve, <strong>de</strong>jó en c<strong>la</strong>ro que sabía hacer (Alejandro Tomasini Bassols) 1781 .<br />

¿O hacerse con <strong>la</strong> supremacía frente a su más bril<strong>la</strong>nte contendor: Trotsky (por sobre<br />

su espectacu<strong>la</strong>r “resumen <strong>de</strong> El Capital”), en <strong>la</strong> refriega por asumir <strong>la</strong> coordinación <strong>de</strong>l<br />

naciente segmento humano socialista? 1782 .<br />

Sobre esta anatemización, el camarada Enver Hoxha anota:<br />

“Pero hasta los cabecil<strong>la</strong>s <strong>de</strong>l mundo capitalista tales domo Churchill, Roosevelt,<br />

Truman, Edén, Montgomery, Hopkins y otros se han visto obligados a reconocer los<br />

méritos incontrastables <strong>de</strong> Stalin, aunque al mismo tiempo, no guar<strong>de</strong>n en secreto su<br />

hostilidad hacia el marxismo-leninismo, su política, su i<strong>de</strong>ología y hacia Stalin<br />

personalmente. Yo he leído sus memorias y he visto que esos dirigentes capitalistas<br />

hab<strong>la</strong>n con respeto acerca <strong>de</strong> Stalin como estadista y estratega militar, le <strong>de</strong>scriben<br />

como una persona ‘dotada <strong>de</strong> un remarcable sentido <strong>de</strong> estrategia’, ‘con una<br />

incomparable agu<strong>de</strong>za mental para compren<strong>de</strong>r rápidamente los problemas’.<br />

Churchill ha dicho acerca <strong>de</strong> Stalin, ‘...respeto a este ser gran<strong>de</strong> y bril<strong>la</strong>nte... muy<br />

poca gente en el mundo pudo haber comprendido problemas sobre los cuales nosotros<br />

hemos estado confundidos durante meses, así, en pocos minutos: él había<br />

comprendido todo en un segundo”.<br />

El mariscal Montgomery, sobre Stalin, específicamente ha dicho:<br />

1781<br />

Stalin, el magno ser humano, concreto, al frente <strong>de</strong> miles <strong>de</strong> seres humanos; Stalin, que en el Kremlin<br />

recibía cada día a <strong>de</strong>cenas <strong>de</strong> compatriotas con <strong>de</strong>ferencia, c<strong>la</strong>ro: tan sólo en citas <strong>de</strong> 3 minutos, puesto que<br />

<strong>de</strong>bía aten<strong>de</strong>r a todos.<br />

1782<br />

“<strong>La</strong> burguesía imperialista siempre ha presentado esta lucha como una pugna personal por el po<strong>de</strong>r entre<br />

Stalin y Trotsky y no como un aspecto más <strong>de</strong> <strong>la</strong> lucha <strong>de</strong> c<strong>la</strong>ses contra <strong>la</strong> burguesía en el seno <strong>de</strong>l Partido. Sobre<br />

esta época <strong>de</strong> <strong>la</strong> vida <strong>de</strong> Stalin existe gran número <strong>de</strong> re<strong>la</strong>tos ten<strong>de</strong>nciosos <strong>de</strong> origen trotskista, que más que nada<br />

consisten en <strong>la</strong> <strong>de</strong>scripción monótona <strong>de</strong> una serie <strong>de</strong> ‘conjuras’ e intrigas, <strong>de</strong> ‘alianzas’ entre éste o aquel<br />

dirigente, etc. Por nuestra parte, al tratar <strong>de</strong> esta materia, nos atendremos esencialmente a <strong>la</strong>s cuestiones políticas<br />

y <strong>de</strong> principios, es <strong>de</strong>cir a los temas en torno <strong>de</strong> los cuales se <strong>de</strong>sarrolló <strong>la</strong> polémica. <strong>La</strong> colectivización <strong>de</strong>l<br />

campo, un episodio más <strong>de</strong> <strong>la</strong> lucha <strong>de</strong> c<strong>la</strong>ses bajo el socialismo en <strong>la</strong> URSS, como no podía ser <strong>de</strong> otra forma,<br />

corría parale<strong>la</strong> a una fuerte discusión -también otra más- en el interior <strong>de</strong>l Partido bolchevique entre dos<br />

corrientes políticas opuestas. <strong>La</strong> más conocida -pero no <strong>la</strong> más importante- <strong>de</strong> esas corrientes es <strong>la</strong> trotskista, un<br />

movimiento insignificante inf<strong>la</strong>do hasta <strong>la</strong> saciedad por <strong>la</strong> propaganda imperialista. En realidad Trotsky nunca<br />

formó parte <strong>de</strong>l Partido bolchevique, hasta pocos días antes <strong>de</strong> <strong>la</strong> revolución, cuando en plena efervescencia <strong>de</strong>l<br />

movimiento <strong>de</strong> masas, se incorporó -como tantos otros- a <strong>la</strong>s fi<strong>la</strong>s bolcheviques a <strong>la</strong>s que antes había combatido<br />

sin cesar. Triunfó <strong>la</strong> línea marxista-leninista <strong>de</strong> continuar <strong>la</strong> construcción <strong>de</strong>l socialismo que encabezaba Stalin, y<br />

<strong>la</strong>s posiciones <strong>de</strong>rrotistas y c<strong>la</strong>udicadoras que bullían en su seno fueron <strong>de</strong>puradas y expulsadas <strong>de</strong>l Partido.<br />

Porque mientras Trotsky volvió finalmente al lugar <strong>de</strong>l que había salido, a <strong>la</strong>s fi<strong>la</strong>s <strong>de</strong> <strong>la</strong> reacción, Stalin siguió<br />

también don<strong>de</strong> siempre había estado: entre los bolcheviques. Así que <strong>la</strong> inmensa mayoría <strong>de</strong>l Partido estaba por<br />

un <strong>la</strong>do, y Stalin con él, mientras por el otro estaban Trotsky y un reducido número <strong>de</strong> militantes que se podían<br />

contar con los <strong>de</strong>dos <strong>de</strong> <strong>la</strong>s manos. Trotsky fue admitido en <strong>la</strong> dirección <strong>de</strong>l Partido y asumió importantes<br />

funciones tras <strong>la</strong> Revolución como responsable <strong>de</strong>l Ejército Rojo, en el que tuvo que ser <strong>de</strong>stituido pocos meses<br />

<strong>de</strong>spués, tras sus reiterados fracasos en <strong>la</strong> dirección <strong>de</strong> <strong>la</strong> guerra con los contrarrevolucionarios. Fue sustituido en<br />

esa función por Stalin y a partir <strong>de</strong> ahí sus <strong>de</strong>svaríos no cesaron. A pesar <strong>de</strong> ello, los bolcheviques <strong>de</strong>mostraron<br />

una paciencia más propia <strong>de</strong> los franciscanos que <strong>de</strong> los revolucionarios. Tuvo que ser <strong>de</strong>stituido <strong>de</strong> <strong>la</strong> dirección<br />

<strong>de</strong>l Partido, luego expulsado <strong>de</strong> él, luego expulsado <strong>de</strong> <strong>la</strong> URSS y, finalmente, ejecutado en México”<br />

(Bibliografía política <strong>de</strong> Stalin-El socialismo en un solo país… HTML Document).<br />

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