11.07.2015 Views

it-eso-stephen-king

it-eso-stephen-king

it-eso-stephen-king

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

cuencas, húmedos.—¿Lo he asustado, amigo? –tronó.Y Richie oyó que su boca decía, sin relaciónalguna con su cerebro petrificado:—Las emociones baratas, en el asiento traserode mi coche, Bozo, <strong>eso</strong> es todo.El payaso sonrió, asintiendo, como si noesperase otra cosa. Sus labios rojos se abrieronpara mostrar unos dientes como colmillos, cadauno de los cuales terminaba en una punta denavaja.—Podría cogerte ahora si quisiera –dijo–. Peroesto va a ser muy divertido.—Para mí también –dijo la boca de Richie–. Ylo más divertido será cuando vayamos a arrancartela cabeza, capullo.La sonrisa del payaso se ensanchó más aún.Levantó una mano, con su guante blanco, y Richiesintió que el viento provocado por el gesto leapartaba el pelo de la frente, como veintisiete añosantes. El dedo índice lo señaló, grande como unaviga."Grande como una vi...", pensó Richie. Yentonces sintió de nuevo el dolor, hundiendo picasherrumbradas en la suave gelatina de sus ojos.—Antes de mirar la paja en el ojo ajeno, fíjateen la viga que tienes en el propio –entonó el payasocon voz vibrante.1017

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!