11.07.2015 Views

it-eso-stephen-king

it-eso-stephen-king

it-eso-stephen-king

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

—Sí.—Yo....—Enséñame a volar –dice ella con una calmaque no siente, notando que él se ha echado allorar–. Enséñame, Ben.—No....—Si tú escribiste el poema, enséñame. Tócameel pelo si quieres, Ben. Adelante.—Yo, Beverly... yo....Ben parece sacudirse convulsivamente. Peroella percibe otra vez que no se trata sólo de miedo.Ella ha provocado parte de esa convulsión queconst<strong>it</strong>uye la médula del acto. Piensa en("los pájaros")su cara, su cara seria, dulce, querida, y sabe que<strong>eso</strong> no es miedo: lo que él siente es deseo, un deseoprofundo y apasionado que apenas puedecontener, y ella vuelve a experimentar esasensación de poder, de algo parecido a volar, comomirar desde arriba y ver todos los pájaros en lostejados, en la antena del bar de Wally, de ver lascalles como en un mapa, oh sí, eran el amor y eldeseo lo que enseñaban a volar.—¡Ben...! ¡Sí, así...! –exclama súb<strong>it</strong>amente.Y el himen se rompe.Duele otra vez y por un momento Beverly tienela sensación de ser aplastada. Luego él se incorpora1881

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!