11.07.2015 Views

it-eso-stephen-king

it-eso-stephen-king

it-eso-stephen-king

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

golpeando ligeramente el mostrador con losnudillos, para dar énfasis–. ¿Has oído alguna vezde una amnesia tan absoluta que uno ni siquiera sedé cuenta de que la padece?Ricky Lee sacudió la cabeza.—Yo tampoco. Pero esta noche, mientras veníahacia aquí, recordé todo de golpe. Recordaba aMike Hanlon, pero sólo porque él me habíallamado por teléfono. Me acordaba de Derry, perosólo porque él me había llamado desde allá.—¿Derry?—Y <strong>eso</strong> era todo. Me di cuenta de que nopensaba en mi infancia desde... No sé siquieradesde cuándo. Y entonces, justo en ese momento,todo volvió en un torrente. Como lo que hicimoscon el cuarto dólar de plata, por ejemplo.—¿Qué hicieron con él, señor Hanscom?El ingeniero consultó su reloj y, de pronto, selevantó. Se tambaleó apenas. Eso fue todo.—No puedo perm<strong>it</strong>ir que se me escape eltiempo –dijo–. Esta noche tengo que volar.Ricky Lee puso expresión de alarma. Hanscomse echó a reír.—No seré yo quien pilote el avión. Esta vez no.Voy con Un<strong>it</strong>ed Airlines, Ricky Lee.—Ah. –Seguramente se le vio el alivio en lacara, pero no importaba–. ¿Adónde va?138

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!