11.07.2015 Views

it-eso-stephen-king

it-eso-stephen-king

it-eso-stephen-king

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

—¿Tenéis hijos tú y tu mujer? –preguntó Mike.—Si has estado siguiéndonos el rastro comodices, sabes muy bien que no tenemos. Pero insistoen que <strong>eso</strong> no significa nada.—¿Habéis "tratado" de tenerlos?—No usamos anticonceptivos, si a <strong>eso</strong> terefieres. –Eddie hablaba con una dignidadconmovedora, pero tenía las mejillas arreboladas–.Sucede que mi esposa tiene algunos... ¡Mierda!Tiene un montón de kilos de más. Consultamoscon un médico y él nos dijo que mi esposa nopodría tener hijos si no bajaba de p<strong>eso</strong>. ¿Somoscriminales por <strong>eso</strong>?—Tómatelo con calma, Eds –lo tranquilizóRichie, inclinándose hacia él.—¡No me llames Eds y "no se te ocurra"pellizcarme las mejillas! –exclamó él, girandohacia Richie–. ¡Sabes que no lo soporto!Richie retrocedió, parpadeando.—¿Beverly? –preguntó Mike–. ¿Tú y Tom?—No tenemos hijos –dijo–. Y tampoco usamosanticonceptivos. Tom quiere tener chicos... y yotambién, por supuesto –agregó, apresurada,recorriendo a los presentes con la mirada. Bill sedijo que tenía los ojos demasiado brillantes, casicomo los de una actriz que estuviera ofreciendouna buena representación–. Es que aún no hanvenido.887

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!