11.07.2015 Views

it-eso-stephen-king

it-eso-stephen-king

it-eso-stephen-king

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

hacía siglos... desde que era niño, se sintió tentadode pensar. La comida no era una maravilla, perodistaba mucho de ser mala y la había enabundancia. Los seis comenzaron a intercambiarparte de sus platos: costillas, moo goo ga pan, alasde pollo cocidas al vapor, roll<strong>it</strong>os de primavera,brotes de soja envueltos en tocino, tiras de carneensartadas en palillos de madera.Comenzaron con bandejas de pu–pu, y Richie,infantil pero divertido, asó un poqu<strong>it</strong>o de cada cosaen el centro del fondue que compartía con Beverly.—Me encanta flambear las cosas –dijo a Ben–.Comería mierda, siempre que me la flambearan ala vista.—A lo mejor es lo que estás comiendo –comentó Bill.Beverly rió con tantas ganas que tuvo queescupir un bocado en su servilleta.—Oh, Dios, creo que voy a vom<strong>it</strong>ar –dijo Richie,im<strong>it</strong>ando a Don Pardo.Beverly rió aún más, hasta ponerseintensamente roja.—Basta, Richie –dijo–. Te lo advierto.—Acepto la advertencia –dijo Richie–. Que teaproveche, querida.Rose les trajo el postre: una enorme tartaAlaska, que flambeó a la cabecera de la mesa,ocupada por Mike.839

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!