16.04.2013 Views

La crítica de Deleuze al psicoanálisis: el proyecto ... - e-spacio UNED

La crítica de Deleuze al psicoanálisis: el proyecto ... - e-spacio UNED

La crítica de Deleuze al psicoanálisis: el proyecto ... - e-spacio UNED

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

lo divino, que Heráclito hubiera <strong>de</strong>nominado logos. Debemos recordar que ese logos entendido<br />

como pensamiento sin sujeto y <strong>de</strong>nominado <strong>de</strong>s<strong>de</strong> otras partes Inconsciente, es <strong>el</strong> que nosotros<br />

queremos perseguir en nuestra investigación en tanto advertimos que <strong>D<strong>el</strong>euze</strong> se enmarca en esa<br />

tradición <strong>de</strong> pensadores que <strong>de</strong>searon señ<strong>al</strong>ar ese pensamiento sin sujeto como límite posibilitante<br />

<strong>de</strong>l pensar. Examinemos, en primer lugar, qué es <strong>el</strong> amor en Spinoza y cómo, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> su optimismo<br />

racion<strong>al</strong>, éste se impone sobre <strong>el</strong> odio, <strong>el</strong> miedo y <strong>de</strong>más afectos tristes. Spinoza <strong>de</strong>fine <strong>el</strong> amor<br />

como “una <strong>al</strong>egría acompañada por la i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> una causa exterior” 1005 , un contento ante la<br />

presencia <strong>de</strong> la cosa amada que fortifica <strong>al</strong> amante, sin que tenga que mediar necesariamente un<br />

excesivo apego. El afecto contrario <strong>al</strong> amor es <strong>el</strong> odio, que se <strong>de</strong>fine, inmediatamente <strong>de</strong>spués,<br />

como “una tristeza acompañada por la i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> una causa exterior” 1006 . Spinoza consi<strong>de</strong>ra que <strong>el</strong><br />

amor <strong>de</strong>l humano por otros humanos le es esenci<strong>al</strong>, pues en compañía nuestro entendimiento es<br />

más potente, como bien hubieran indicado Platón, Aristót<strong>el</strong>es y los <strong>de</strong>más griegos que hemos<br />

citado en <strong>el</strong> presente capítulo. Veamos como lo expresa Spinoza: “... no po<strong>de</strong>mos vivir sin tener<br />

<strong>al</strong>gún comercio con las cosas que están fuera <strong>de</strong> nosotros; si, a<strong>de</strong>más, tomamos en consi<strong>de</strong>ración<br />

nuestra <strong>al</strong>ma, vemos que nuestro entendimiento sería más imperfecto si <strong>el</strong> <strong>al</strong>ma estuviera aislada y<br />

no supiese <strong>de</strong> nada que no fuera <strong>el</strong>la misma. Así pues, hay muchas cosas fuera <strong>de</strong> nosotros que nos<br />

son útiles y que, por <strong>el</strong>lo, <strong>de</strong>ben ser apetecidas. Y entre <strong>el</strong>las, las más exc<strong>el</strong>entes son las que<br />

concuerdan por completo con nuestra natur<strong>al</strong>eza. En efecto: si, por ejemplo, dos individuos que<br />

tienen una natur<strong>al</strong>eza enteramente igu<strong>al</strong> se unen entre sí, componen un individuo doblemente<br />

potente que cada uno <strong>de</strong> <strong>el</strong>los por separado. Y así, nada es más útil <strong>al</strong> hombre que <strong>el</strong> hombre;<br />

quiero <strong>de</strong>cir que nada pue<strong>de</strong>n <strong>de</strong>sear los hombres que sea mejor para la conservación <strong>de</strong> su ser<br />

que <strong>el</strong> concordar todos en todas las cosas, <strong>de</strong> suerte que las <strong>al</strong>mas <strong>de</strong> todos formen como una sola<br />

<strong>al</strong>ma, y sus cuerpos como un solo cuerpo, esforzándose todos a la vez, cuanto puedan, en<br />

conservar su ser, y buscando todos a una la común utilidad; <strong>de</strong> don<strong>de</strong> se sigue que los hombres<br />

que se gobiernan por la razón, es <strong>de</strong>cir, los hombres que buscan su utilidad bajo la guía <strong>de</strong> la<br />

razón, no apetecen para sí nada que no <strong>de</strong>seen para los <strong>de</strong>más hombres, y, por <strong>el</strong>lo, son justos,<br />

dignos <strong>de</strong> confianza y honestos” 1007 ; “... sin la ayuda mutua, los hombres apenas si pue<strong>de</strong>n<br />

sustentar su vida y cultivar su mente” 1008 ; “... <strong>el</strong> <strong>de</strong>recho natur<strong>al</strong>, que es propio <strong>de</strong>l género<br />

1005 Spinoza: Ética. op.cit. 3, Definiciones <strong>de</strong> los afectos, VI. p. 237.<br />

1006 Ibi<strong>de</strong>m.<br />

1007 Ibid. 4, prop. XVII, Escolio. p. 272.<br />

1008 B. Spinoza: Tratado político. Ed. Alianza. Madrid, 2004. p. 99.<br />

441

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!