La crítica de Deleuze al psicoanálisis: el proyecto ... - e-spacio UNED

colectivos de enunciación funcionan como condiciones de posibilidad del reconocimiento, como
expresiones que anticipan, inmanentemente, los contenidos, y, por ello, tienen la capacidad de
donar potencia, pero también la de asimilar, sujetar, capturar, expropiar fuerza. La lucha es, para
nosotros, por la busqueda de la composición de agentes colectivos de enunciación que operen la
selección de ese reconocimiento en base a valores productivos, de alegría, de amor, que aumenten
la capacidad de obrar, y no en base a valores reactivos, de tristeza, de miedo, que no promuevan
sino una complacencia autolegitimadora. Queremos agenciamientos un poco más ludópatas, con un
máximo de fuerza y un mínimo de organización (y con mínimo no queremos decir ninguno), que
constituyan sujetos que actúen más que sufran. Si los enunciados no son ni infraestructurales ni
superestructurales es porque son, como decíamos anteriormente, performativos: causan, pero
inmanentemente, por lo que, al mismo tiempo, son efectuaciones. Sería, tal vez, más adecuado,
hablar de profundidad y de superficies, siempre y cuando no recaigamos en transcedentismos. El
agente colectivo de enunciación se singulariza en una máquina pero, de ningún modo, funcionan
independientemente, y ambos son multiplicidades. Deleuze pone como ejemplo la Máquina
abstracta-Lenin y el agenciamiento colectivo-bolchevique, siendo la unidad (no cerrada) una
efectuación política. Una máquina muestra su multiplicidad en tanto que deviene minoritaria. Una
efectuación política muere en tanto que clausura sus contornos: “...la question n´était pas :
comment échapper au mot d'ordre ? - mais comment échapper à la sentence de mort qu'il
enveloppe, comment développer sa puissance de fuite, comment empêcher la fuite de tourner dans
l'imaginaire, ou de tomber dans un trou noir comment maintenir oudégager la potentialité
révolutionnaire d'un mot d'ordre ?” 1175 (“... el problema no era, cómo escapar a la consigna, sino
cómo escapar a la sentencia de muerte que encierra, cómo desarrollar su capacidad de fuga,
cómo impedir que la fuga se transforme en lo imaginario, o caiga en un agujero negro, cómo
mantener o liberar la potencialidad revolucionaria de una consigna” 1176 ). El agente colectivo de
enunciación es la condición de posibilidad para una política del acontecimiento, es decir, para una
política del devenir, en la que no se avanza por caminos pretrazados sino por experimentación
(asumiendo que los errores forman parte de ella), y en la que el agente nunca es la persona o
cógito, incapaz como es de devenir por sí misma (teniendo en cuenta que el devenir se da en la
relación y no en los términos configurados). Así, el agente colectivo de enunciación, sería el objeto
de estudio principal de una ontología política, es decir, de un proyecto basado en la necesidad de
insuflar procesos revolucionarios bajo planteamientos de inmanencia: en ausencia de teleologismos
1175 G. Deleuze et F. Guattari: Mille plateaux. op.cit. p. 139.
1176 G. Deleuze y F. Guattari: Mil mesetas. op.cit. pp. 111.
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