O Estado oculto - Repositorio Institucional da USC - Universidade ...

sucede na terceira vaga democratizadora, na que uns líderes que asumen o
risco da democracia contan ademais cunhas condicións idóneas.
Linz (1993, 31) coincide con este modelo:
Un problema con el que todo científico social tiene que enfrentarse cuando
analiza situaciones de crisis, como [...] el paso de Franco a la democracia, es el papel
de algunos actores clave, de los que ocupan puestos clave. ¿Supone alguna diferencia
la personalidad y la mentalidad de individuos concretos, o esos individuos están ahí
para representar un guión de acuerdo con una serie de tensiones estructurales,
conflictos y sistemas «institucionalizados» de creencias? Sería más fácil para el
científico social que fuera lo segundo, pero la realidad es distinta. [...] El hecho de que
un hombre como el cardenal Tarancón ocupara una posición crucial como arzobispo de
Madrid y secretario de la Conferencia Episcopal explica mucho de lo que sucedió en las
relaciones de Iglesia y Estado en los años setenta. Podría argüirse que no fue
accidental que estuviera en ese puesto, ya que Pablo VI personalmente quiso que
ocupara ese lugar a la vista de los difíciles tiempos que se aproximaban. Aun así,
dentro de ciertos límites estructurales el liderazgo parece haber producido
considerables diferencias [...].
Respecto desta cuestión, a base da postura de Linz é o individualismo
metodolóxico 240 formulado por Max Weber 241 “en una carta de 1920”, que o
autor concreta na seguinte cita (cuxa tradución española se atribúe o propio
Linz):
«La sociología sólo es posible partiendo de las acciones de unos pocos o de muchos
individuos [einzelnen]; estrictamente individualista en el método ... El Estado en su
significado sociológico no es nada más que la probabilidad [chance] de que ciertos
modos de acción específicos tengan lugar. Acciones de individuos humanos concretos.
Nada más ... lo subjetivo en ello está en que las acciones están guiadas por
concepciones concretas. Lo objetivo es que nosotros los observadores sentimos que
hay una probabilidad de que esas acciones orientadas por esas concepciones tendrán
lugar. Si no hay tal probabilidad, el Estado deja de existir.» 242
Polo tanto, o escepticismo de Linz fronte aos científicos sociais que
poñen o acento da súa análise nos elementos estruturais débese ao
convencemento de que os protagonistas dos procesos político-sociais son os
actores políticos. As transicións, concretamente, son procesos basicamente
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