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Diccionario Teológico del Nuevo Testamento - Compendio - Kittel

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padres. Así como la fe cristiana es vana si no acepta la realidad de la resurrección, así la religión cristiana es vana si deja de lado el<br />

mandato divino en un autoengaño arrogante (Stg. 1:26).<br />

ματαιότης. Esta palabra poco común se usa en griego para la nada humana. La LXX la usa más a menudo, p. ej. en Salmo 39:6;<br />

144:4. Eclesiastés 1:2 llama vanidad a todas las cosas; es por eso que debemos tornar nuestros ojos hacia Dios, el único en que no<br />

hay ματαιότης. Romanos 8:20 recoge la idea de Eclesiastés 1:2. La creación está sujeta a la vanidad, pero Dios se halla antes y<br />

después de ella, de modo que esa sujeción es en la esperanza de la gloria final. Efesios 4:17 describe el efecto de la vanidad en la<br />

sociedad humana (cf. 2 P. 2:18).<br />

ματαιόω. Esta palabra bíblica se usa una vez en voz activa en la LXX («engañar»), pero mayormente en voz pasiva («ser entregado<br />

a la vanidad»). El significado en Romanos 1:26 es que aquellos que no honran a Dios ni le dan gracias son entregados a un<br />

pensamiento fútil (cf. 1 Co. 3:20).<br />

μάτην. Este adverbio significa a. «en vano», b. «sin sentido», y c. «engañosamente». Tiene el sentido a. en Mateo 15:9 y Marcos<br />

7:7, que citan a Isaías 29:13.<br />

ματαιολογία. Esta palabra, que significa «palabrería vacía», se usa en 1 Timoteo 1:6 para aquellos que abandonan la fe sincera.<br />

ματαιολόγος. Esta palabra figura en plural en Tito 1:10 para los «habladores de vanidades».<br />

[O. Bauernfeind, IV, 519–524]<br />

μάχαιρα [espada]<br />

μάχαιρα denota el «cuchillo» que se usa en los sacrificios, en la cocina, en el jardín, etc., luego la «espada pequeña» p. ej. el sable<br />

o la daga. En la LXX es el cuchillo en Génesis 22:6; Josué 5:2–3, pero principalmente la daga o espada corta.<br />

1. En el NT esta palabra se usa 1. para las espadas en el arresto de Jesús (Mt. 26:47, 55). Cuando uno de los discípulos saca su<br />

μάχαιρα, Jesús le dice que la vuelva a guardar, porque quienes toman la μάχαιρα perecerán con ella (Mt. 26:51–52). En Hebreos<br />

11:34, 37 algunos de los héroes de la fe escapan de la espada, mientras que otros son muertos con ella (cf. 1 R. 19:10), en tanto que<br />

en Lucas 21:24 la gente de Judea caerá a filo de espada, y en Hechos 12:2 Santiago es muerto a espada. En Apocalipsis 6:4, al<br />

jinete <strong>del</strong> caballo rojizo se le da una gran μάχαιρα.<br />

[p 562] 2. En Mateo 10:34 el uso es obviamente figurado. Los que siguen a Jesús deben estar preparados para la hostilidad, incluso<br />

en sus propias familias. También es figurado el uso en Lucas 23:35ss, donde Jesús no está pidiendo una defensa armada sino advirtiendo<br />

a sus discípulos que estén preparados para el sacrificio final.<br />

3. En Efesios 6:17 la μάχαιρα es parte de la armadura espiritual de los cristianos. La espada es la palabra de Dios.<br />

4. Una idea similar se da en Hebreos 4:12, excepto que aquí la μάχαιρα es con más probabilidad el cuchillo <strong>del</strong> sacerdote, carnicero<br />

o cirujano, puesto que su función no es la de destruir o castigar, sino la de perforar y abrir.<br />

[W. Michaelis, IV, 524–527]<br />

μάχομαι [luchar, pelear], μάχη [pelea, riña], ἄμαχος [no dado a peleas], θεομάχος [que lucha contra Dios], θεομαχέω [luchar<br />

contra Dios]<br />

μάχομαι, μάχη, ἄμαχος. Este grupo se usa para el combate físico, especialmente de tipo militar. El uso militar predomina en la<br />

LXX. Sin embargo, en el NT sólo Hechos 7:26 se relaciona sin duda con el conflicto físico. En Juan 6:52 el punto es la contienda<br />

de palabras. En 2 Corintios 7:5 tal vez estén implícitas las amenazas físicas, y Santiago 4:1–2 es debatible. La contienda es incorrecta<br />

para los cristianos (2 Ti. 2:23; Tit. 3:9: disputas legales). Los obispos (1 Ti. 3:3), y de hecho todos los cristianos (Tit. 3:2) no<br />

deben ser dados a peleas (ἄμαχος). Donde hay contienda, se debe a las pasiones. Por eso se usan otras palabras para el necesario<br />

combate espiritual de los creyentes, p. ej. ἀγωνίζεσθαι.<br />

θεομάχος, θεομαχέω. Estas palabras poco comunes denotan el contender contra Dios. En Hechos 5:39 Gamaliel advierte a los<br />

miembros <strong>del</strong> consejo que procedan con cautela, no sea que resulten estar oponiéndose a Dios. Lucas sigue a Eurípides en este uso,<br />

aunque sin sugerir que la marcha <strong>del</strong> evangelio se parezca en modo alguno a la de Dionisos (a quien resulta fatal oponerse).<br />

[O. Bauernfeind, IV, 527–528]

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