07.05.2013 Views

Diccionario Teológico del Nuevo Testamento - Compendio - Kittel

Diccionario Teológico del Nuevo Testamento - Compendio - Kittel

Diccionario Teológico del Nuevo Testamento - Compendio - Kittel

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

582<br />

παῖς [niño], παιδίον [niño pequeño], παιδάριον [niño pequeño], τέκνον [niño, hijo], τεκνίον [niñito, hijito], βρέφος [embrión,<br />

bebé]<br />

A. Datos léxicos.<br />

1. βρέφος. Esta palabra tiene sentidos tales como «embrión», «joven», «bebé», «niño pequeño».<br />

2. παῖς. Esta palabra significa «niño» (generalmente «niño varón», pero también «niña»), y con referencia a la descendencia «hijo»,<br />

o con referencia a la posición social «siervo». Otro uso es para una clase, p. ej. los oradores o los médicos (παῖδες ῥητόρων,<br />

παῖδες Ἀσκληπιοῦ). Figuradamente, las obras de un autor son sus «hijos».<br />

3. παιδίον. Esta palabra significa «niño pequeño, niñito», con referencia a la edad o a la progenie, y puede denotar también «siervo»<br />

(posición social). Figuradamente lleva el sentido de un entendimiento no desarrollado, pero también se usa al dirigirse con afecto a<br />

una persona (cf. Jn. 21:5; 1 Jn. 2:18).<br />

4. παιδάριον. Este es otro diminutivo que denota «niño varón pequeño» o «esclavo joven».<br />

5. τέκνον. Esta palabra significa «niño» (o «hijo») en el sentido de progenie (también la progenie espiritual en Mt. 3:9; Gá. 3:7; 1 P.<br />

3:6; cf. Gá. 4:21ss; 2 Jn. 1; Lc. 7:35). Los habitantes de Jerusalén son [p 740] sus «hijos» en Joel 2:23; Mateo 23:37; Lucas 13:34.<br />

También leemos sobre los «hijos de la luz» (Ef. 5:8), de la «ira» (2:3), de la «obediencia» (1 P. 1:14) y de la falsa profetisa (Ap.<br />

2:13).<br />

6. τεκνίον. Este es un término propio de nodrizas para «niño pequeño». En el NT figura sólo cuando se habla a alguien con afecto<br />

(Jn. 13:33; 1 Jn. 2:12, 28; 3:7, 18; 4:4; 5:21).<br />

B. El niño desde el punto de vista natural y ético-religioso.<br />

I. La antigüedad.<br />

1. Estima positiva original. Los niños, especialmente los hijos varones, son valorados altamente en la antigüedad temprana, porque<br />

favorecen la fuerza de la familia y <strong>del</strong> estado. Su nacimiento se acoge con banquetes. Roma asume una postura similar, pero con<br />

pocos sentimientos personales.<br />

2. Decadencia y medidas contrarias en el período clásico. Hay factores cultuales y genéticos en el origen <strong>del</strong> abandono o exposición<br />

de niños, pero también son importantes las consideraciones económicas. Con los abortos y la prevención de embarazos sobreviene<br />

una disminución de la población. A los niños se los considera poco importantes. Se aprueban leyes que favorecen a las familias<br />

más numerosas, pero el éxito es poco. Los filósofos tienden a rehuir el matrimonio, la poesía ensalza el amor libre, y la novela<br />

describe el adulterio, los celos, la alcahuetería y la pederastia. Otra tendencia que se desarrolla es hacia la continencia, incluso<br />

dentro <strong>del</strong> matrimonio.<br />

3. El redescubrimiento <strong>del</strong> niño en el helenismo. El amor de los padres continúa; se provee para los hijos y se ora por ellos, y se llora<br />

al perderlos. La poesía revive motivos antiguos, p. ej. el niño divino de la edad de oro (Virgilio). El teatro recurre en parte a los<br />

niños (en las bromas de muchachos), y el arte da mejores retratos de los niños. Pero el gusto es sentimentaloide y perverso: los<br />

ricos con frecuencia se entretienen con niños esclavos. Por otra parte, nada impide que los niños se vuelvan emperadores.<br />

4. Evaluación ético-religiosa. La antigüedad rara vez habla de la inocencia de los niños. El niño no tiene complicaciones sexuales,<br />

comprende poco la alegría o el sufrimiento, y no sabe engañar (aunque principalmente por inmadurez intelectual). La idea <strong>del</strong> niño<br />

prodigio es fuerte en Egipto. También se dan ideas de la imperfección universal y de la culpa. Así, el orfismo detecta un nexo con<br />

el mal, que los ritos de iniciación deben superar. El concepto <strong>del</strong> cuerpo como una cárcel va en la misma dirección. Pero estas<br />

ideas son marginales. El rasgo principal <strong>del</strong> niño es la inmadurez o su carácter infantil. El niño vive para el momento y simplemente<br />

juega con las cosas. La educación tiene la tarea de aprovechar en algo esta materia prima, y con las dotes normales y las técnicas<br />

adecuadas podrá cumplir su cometido, pero con poco amor por el niño o consideración por su personalidad en desarrollo.<br />

5. El niño en el culto.<br />

a. Los niños desempeñan una parte en el culto desde su nacimiento. Se los coloca bajo protección divina, están presentes en los ritos<br />

cultuales, y se los puede alzar para que besen a los dioses de la familia.<br />

b. Los hijos de los sacerdotes y de otros grupos privilegiados prestan servicio en los sacrificios. Existen escuelas en los templos. A<br />

los niños se les atribuye una facultad adivinatoria, ya sea consciente o inconsciente. Los niños participan en procesiones de inter-

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!