07.05.2013 Views

Diccionario Teológico del Nuevo Testamento - Compendio - Kittel

Diccionario Teológico del Nuevo Testamento - Compendio - Kittel

Diccionario Teológico del Nuevo Testamento - Compendio - Kittel

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

[F. Hauck, V, 116]<br />

οἶδα [saber, conocer, entender]<br />

519<br />

1. οἶδα, que significa «saber» y es más o menos sinónimo de γινώσκω, se suele usar en el NT de manera general, p. ej. conocer a<br />

una persona en Marcos 14:71, poder entender en Mateo 7:11, captar en Efesios 1:18, y reconocer en 1 Tesalonicenses 5:12.<br />

2. Desde el punto de vista teológico es significativa la frase «conocer (o no conocer) a Dios o a Cristo». El no conocer a Dios es cosa<br />

culpable, como en el AT (cf. Gá. 4:8; Tit. 1:6; 1 Ts. 4:5). Los demonios conocen a Jesús (Mr. 1:24), pero tratan de defenderse<br />

declarando su verdadero nombre. En contraposición a los gnósticos en Corinto, Pablo está resuelto a no saber otra cosa que el<br />

Cristo crucificado (1 Co. 2:2). En contraposición a los judaizantes, insiste en algo más que el conocimiento de Jesús en la tierra (2<br />

Co. 5:16).<br />

3. En Juan, se dice que Jesús conoce a Dios (7:28–29). No se trata de un conocimiento abstracto, sino de un conocimiento de la<br />

misión que produce obediencia (8:55). Jesús sabe que su misión va a desembocar en su muerte (13:1ss). Los judíos, sin embargo,<br />

no conocen a Jesús (8:23). El Bautista está consciente de ello (1:26). Ni siquiera los discípulos lo conocen (4:32; 14:7). Sin embargo<br />

ellos no son de este mundo, y por eso se les promete el conocimiento cuando Jesús se vaya y venga el Paráclito (14:15ss;<br />

16:7ss).<br />

[H. Seesemann, V, 116–119]<br />

[p 659] οἶκος [casa, familia, linaje, raza], οἰκία [casa, familia], οἰκεῖος [miembro], οἰκέω [vivir, habitar], οἰκοδόμος [constructor],<br />

οἰκοδομέω [construir, edificar], οἰκοδομή [edificio, edificación], ἐποικοδομέω [edificar sobre], συνοικοδομέω<br />

[edificar juntamente], οἰκονόμος [mayordomo, administrador], οἰκονομία [administración], κατοικέω [habitar, morar],<br />

οἰκητήριον [morada, hogar], κατοικητήριον [morada, hogar], κατοικίζω [hacer habitar], οἰκουμένη [el mundo habitado]<br />

οἶκος (→ οἰκία)<br />

1. Uso griego y helenístico general. οἶκος significa «casa» o «morada». La morada puede ser una cueva, un templo, un palacio, o<br />

incluso un sepulcro. En los papiros οἶκος también puede significar «asuntos domésticos», «riqueza» o «propiedad». En la astrología<br />

se usa para la «estación» de los planetas.<br />

2. «Casa» y «casa de Dios» en el AT. οἶκος, que principalmente traduce el hebreo תִ יּבּ, ַ es vocablo común en la LXX. Puede<br />

significar «familia», pero con θεοῦ se suele usar para «santuario». Como οἰκία, también significa «casa»; cf. la casa que construye<br />

la sabiduría en Proverbios 9:1 (y las referencias rabínicas a la casa de la ley).<br />

3. «Casa de Dios» en Jesús y los Evangelios. El NT usa tanto οἶκος como οἰκία, pero por lo general conecta τοῦ θεοῦ con οἶκος,<br />

reservando la expresión para el templo (o para la comunidad cristiana, Heb. 3:6; 1 P. 4:17). Jesús habla acerca de la casa de Dios<br />

en Marcos 2:26 y en Marcos 11:17 (basado en Is. 56:7), donde el templo es santo porque es casa de oración para las naciones (cf.<br />

Jn. 2:16, que evoca Zac. 14:21). Si bien Jesús no usa «la casa de mi Padre» para referirse al templo, como en Lucas 2:49, su frase<br />

puede denotar también el hogar celestial (Jn. 14:2). La casa sugiere también el reino, como en Juan 8:35.<br />

4. La «Casa <strong>del</strong> Padre» celestial en el gnosticismo y en Filón. El gnosticismo favorece la imagen de la «casa». En los escritos<br />

mandeos, el mundo es una morada inferior. A los elegidos se les promete un lugar en la casa <strong>del</strong> Padre, la cual anhelan. También<br />

Filón habla <strong>del</strong> regreso <strong>del</strong> alma a la casa <strong>del</strong> Padre (De los sueños 1.256). Espiritualiza e individualiza el concepto de la casa de<br />

Dios (1.149). La casa divina no es espacial, sino que representa el cuidado de Dios. Cuando se ve el cosmos como una casa, Dios<br />

es obviamente su constructor o Creador. Para Filón, el cuerpo puede representar también la casa <strong>del</strong> alma, y el alma misma es una<br />

casa que alberga pensamientos santos y piadosos (De la confusión de las lenguas, 27) o que recibe al λόγος (De la inmutabilidad<br />

de Dios 135).<br />

5. Dichos cristianos primitivos acerca <strong>del</strong> templo terrenal y contactos con el uso simbólico <strong>del</strong> Cercano Oriente. En Lucas 11:51 a<br />

Zacarías lo matan entre el altar y el οἶκος. En Hechos 7:2ss Esteban distingue entre la tienda y el οἶκος, tal vez prefiriendo la<br />

tienda, a menos que el v. 47 se aplique también a ella. En Mateo 23:38 Jesús puede estar aludiendo al templo, pero también es<br />

posible que tenga en mente a toda la ciudad o a todo el pueblo. En relación con Mateo 12:44; Lucas 11:24, los textos babilónicos y<br />

los textos judíos tardíos hablan acerca de demonios que realizan sus actividades antinaturales en santuarios y casas.<br />

6. «Casa de Dios» como imagen cristiana primitiva para la comunidad. Hebreos 3:1ss llama a Moisés un servidor fiel en toda la<br />

casa de Dios, mientras que Cristo, en contraste, es fiel sobre la casa de Dios como hijo. En el AT «mi casa» se refiere a Israel, de<br />

modo que el pasaje <strong>del</strong> NT evoca la equiparación entre casa y comunidad. La gloria de Moisés se relaciona con la de Cristo como

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!