Libro de Actas del Congreso Regional de la Cátedra ... - UNGS

En la redacción de este periódico los redactores caen como llovidos y salen del
paso como pueden.
Muchos de ellos son médicos ocupados á quienes no les es dado consagrar su
tiempo á un trabajo que no dá glorias ni ganancia y que exije alguna contracción,
cuando menos para que el periódico tenga el valor que hay derecho á exijir del
único órgano del cuerpo médico argentino, en el que sobran las intelijeneias (sic)
bien nutridas y brillantes.
La Revista Médica no responde á las necesidades del país, ni es digna de las
aptitudes de los ilustres médicos que hay en la República.
(…) De ahí que la Revista sea redactada mal, con descuido, por salir del apuro y
sin las pretensiones que con justicia debia tener si ella fuera lo que el cuerpo
médico podia muy bien hacerla ser.”
El mismo Wilde, redactor de la nota que estamos citando, se hace parte de esta
despreocupación por la suerte de la Revista y solicita que el turno se designe por
orden alfabético, con la esperanza de que el tema fuese resuelto durante el año, antes
de que le tocase a él que por su apellido debía ser el último.
La solución que finalmente propone es que aporten los médicos ricos y se pague la
redacción; como esta propuesta no es aceptada, critica ácidamente al cuerpo médico:
“En otras partes del mundo una corporación ama y proteje el periódico que se
considera como órgano suyo –aquí todos nos complacemos en encontrar que la
Revista Médica es insignificante, lo que es lo mismo que escupir al cielo para que
nos caiga en la cara –pues si la Revista es mala ello depende de que nosotros
no la hacemos mejor.
(...) Con semejantes dotes no hemos de hacer jamás patria científica.
No nos hagamos ilusiones.
Para que una asociación viva es necesario que tenga algun estímulo y el mejor
de los estímulos es sin duda una publicacion en que se reflejen y discutan los
trabajos propios y los ajenos.
De allí nace pues la obligacion en que se hallan todos los médicos de Buenos
Aires de fomentar la Revista Médica y procurarle una redaccion responsable y
rentada. –Què se quiere – vivimos en una época en que los trabajos sérios para
ser buenos necesitan ser remunerados.
Si pues la Asociación médica ó el cuerpo médico de Buenos Aires, no puede
sostener ó más bien dicho no quiere sostener un periódico científico bien
redactado, no merece tenerlo y en tal caso, cansado ya de hacerse epígramas,
debe borrar en la carátula de la Revista Médico Quirúrjica estas palabras: -
`Organo de la Asociacion Médica Bonaerense´ pues á juzgar a la Asociacion por
403