Libro de Actas del Congreso Regional de la Cátedra ... - UNGS

efecto dramático diferente y una dinámica de lectura mucho más fluida. Mientras que el
lector del texto original sale al encuentro de una forma extraña y debe, por tanto,
detener su marcha a través del texto y volver sobre lo ya leído, no existe nada en el
texto meta que pueda producir este tipo de efecto en el lector. Se construye así una
instrucción de lectura que dista mucho de aquella que testimonia el original. Es dable
pensar, quizás, que mantener la bastardilla en el texto meta para señalar la palabra
“arroyo” como un discurso otro puede activar una instrucción de lectura que, si bien no
compensa por sí misma el interlingüismo del texto fuente, puede, unida a otras
estrategias, colaborar en la construcción de una práctica de escritura y una práctica de
lectura singulares 4 . De este modo, a esta altura de la colección —recordemos que este
cuento inaugura la tercera y última sección de la obra—, el lector de la traducción
podría reconocer que el empleo de la bastardilla señala una voz distinta, que debe
interpretarse desde los parámetros de otra discursividad. La misma estrategia debería,
tal vez, aplicarse a la traducción del título del cuento, que, en el original, encierra
ciertas claves que solo son asequibles para algunos lectores.
Sabemos, siguiendo a Genette (1987) que la paratextualidad es un espacio en el
que se explicitan distintas instrucciones de lectura, razón por la que, junto con Zoppi
Fontana (2007), podemos afirmar que los títulos son elementos paratextuales que
ejercen un cierto de control discursivo. Más aún y como indica Genette (1962), en el
ámbito de la paratextualidad se dan cita los “sitios privilegiados de la dimensión
pragmática de la obra, es decir, de su acción sobre el lector” (op. cit.: 12).
Examinemos, entonces, el título del cuento que nos ocupa, tanto en el caso del texto
fuente como en el texto meta, para elucidar las prácticas de escritura y las
instrucciones de lectura que cada uno de estos evidencia: WHC / El arroyo de la
Llorona.
El título del cuento “WHC” confiere, sin dudas, una fuerte indicación temática que
contribuye a situar no solo este relato sino toda la colección en el ámbito de la frontera
lingüístico-cultural en que se erige la enunciación en esta escritura. En primer lugar,
debemos observar que en el topónimo que recoge el título y el nombre del arroyo, se
lee una traducción imperfecta —digamos mejor, una versión posible— del español al
inglés de lo que se supone fue, en algún momento, “allá de los indios”, como sanciona
el relato, el nombre original del arroyo en español, que está ubicado en Texas, sitio de
la frontera por excelencia 5 . La alusión al mito de la Llorona en este nombre resulta
4 Al igual que Joysmith (2000), creemos que la explotación del nivel gráfico en la traducción al español de este cuento
debe explotarse en pos de lograr la recreación de la textura interlingüe del relato.
5 La escritora ha tomado aquí el nombre de un arroyo que está ubicado entre San Antonio y Seguin, en el estado de
Texas. Y, como dice el relato, se trata de un arroyo de régimen pluvial.
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