Libro de Actas del Congreso Regional de la Cátedra ... - UNGS

La experiencia
El proyecto se dividió en dos etapas.
En la primera etapa, se realizó una encuesta al inicio del curso de ingreso primera
instancia 2010 sobre un total de 404 alumnos. Se trabajó con una comisión de cada
Departamento o carrera, seis en total. El objetivo era indagar acerca de las
representaciones que los alumnos tienen sobre la lectura y la escritura, sobre ellos
mismos como lectores y escritores, y sobre los requerimientos de la lectura y la
escritura académicas.
En una segunda etapa, se trabajó con un grupo de alumnos en la segunda instancia
de ingreso 2010, también con comisiones de alumnos de los distintos Departamentos,
en una tarea que incluyó la actividad de comprensión y de producción de un texto
escrito, y la posterior descripción de las estrategias utilizadas a través de la confección
de protocolos. Los objetivos eran hacer visible el proceso y detectar problemas en la
comprensión y elaboración de textos escritos.
Finalmente, se contrastaron los resultados obtenidos en las dos partes de la
investigación con el propósito de comparar las representaciones de lectura y de
escritura que los alumnos traen de sus experiencias anteriores a la universidad con los
resultados reales de sus producciones.
Con respecto a las representaciones, de los datos aportados por la encuesta
puede inferirse que la representación que tienen los alumnos de sí mismos como
lectores es mejor a la que poseen como escritores. Además, sus antecedentes con
respecto a las prácticas de lectura y de escritura indicarían una falta de experiencia en
géneros académicos y en lectura crítica derivada del modelo de lectura y escritura al
que han tenido acceso hasta el momento.
Con respecto a su representación como buenos lectores, esa autopercepción
parece estar fundamentada básicamente en su experiencia escolar, que se ha
centrado casi exclusivamente en la lectura de textos de géneros que requieren
habilidades diferentes de las necesarias para una lectura de textos académicos
(Carlino, 2005). Su concepción de lectura comprensiva se inscribe en un modelo de
lectura obediente, que consiste en develar el sentido del texto desde un rol pasivo (Di
Stefano-Pereira, 1997). Ese rol no impide que mayoritariamente reconozcan que
deben leer varias veces “para entender”, que releen, y que se detienen para pensar
(aunque un tercio afirme que leer le resulta “fácil”). Sin embargo, casi no se manifiesta
reconocimiento de cuáles son las dificultades que les impiden comprender un texto, ni
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